La penúltima ilusión de la temporada para la Real también se ha esfumado. A las donostiarras, que la próxima jornada visitarán al Levante Las Planas, ya solo les queda despedirse con el mejor sabor de boca de la Liga y de Zubieta con una victoria ante el Real Madrid dentro de dos semanas. No será un rival como el de hoy, un Barcelona insaciable que siempre encuentra motivación para dar rienda suelta a su calidad, pero tampoco alcanzará si las donostiarras no lo hacen mejor que esta tarde, sobre todo en lo que se refiere a la intensidad defensiva. Porque los cuatro goles de ventaja con los que ha alcanzado el equipo culé la media hora de partido no se ha debido exclusivamente a sus méritos.

Y eso que la Real no ha entrado mal al partido. Con la única presión de disfrutar y sacarse la espinita de la final de la Supercopa y, sobre todo, del encuentro de la primera vuelta, en el que tan cerca se vio de la victoria, el equipo de Natalia Arroyo ha conseguido que durante los primeros minutos aquello fuera lo más parecido a un toma y daca a lo que se puede aspirar ante un rival como éste. Así que mientras Nanclares se lucía para despejar un cabezazo de Mapi León, al otro lado Jensen rozaba el gol picando el balón para que superase a Paños y se marchara ligeramente desviado.

Las esperanzas han desaparecido en un abrir y cerrar de ojos, como suele pasar tantas veces frente a un Barcelona que acostumbra a golear por oleadas. En el 21, Mariona ha asistido desde la izquierda y Patri Guijarro ha dado media vuelta dentro del área despistando a Andreia y rematando el 0-1. Y solo tres minutos después, era la goleadora la que servía desde el mismo punto para que, también en el corazón del área, Oshoala controlara junto a Vanegas y a la media vuelta hiciera el segundo. Apenas han transcurrido cinco más antes de que Graham Hansen recibiera sin oposición en la derecha para centrar el balón que Aitana, igualmente sola en el punto de penalti, anotara el tercero. Dos minutos más tarde anotaba la propia Graham Hansen, cabeceando también sin marcaje un centro de Núria Rábano al segundo palo.

El partido se encaminaba al drama que la Real, mejor mirando a la portería contraria que defendiendo la propia, ha conseguido evitar anotando también antes del descanso. Ha sido Jensen la que ha resuelto con buenos movimiento y ejecución tras recibir de Amaiur.

El choque se ha reanudado con algo menos de ritmo y, pronto, el quinto gol de las visitantes. Marca de la casa de Graham Hansen, que ha conducido para rematar con fuerza desde la frontal un balón imparable. Seis minutos después, la Real volvía a reducir la brecha. Bonita acción por la derecha, con centro de Amaiur que ha prolongado Nerea Eizagirre en busca de Jensen y que ha acabado desviando Patri Guijarro a su propia portería. La balear abría y cerraba así un marcador que ya no se ha movido más, con el Barcelona refrescando su once –ha entrado Alexia, ovacionada por la grada de Zubieta, e incluso ha debutado Lucía Corrales con la elástica culé– y la Real con más control ahora en el centro del campo para evitarse un calvario mayor pero apenas capaz ya de generar ocasiones claras.

Real Sociedad: Nanclares; Le Guilly (Allegra, min.69), Etxezarreta (Tejada, min.46), Vanegas, Bernabé (Izarne, min.46); Iris Arnáiz (Gemma, min.46), Andreia; Amaiur, Franssi, Nerea Eizagirre; y Jensen (Mirari, min.69).

Barcelona: Sandra Paños; Torrejón, Irene Paredes (Martina Fernández, min.77), Mapi León, Núria Rábano (Lucía Corrales, min.77); Aitana, Walsh (Alexia, min.63), Patri Guijarro; Graham Hansen, Oshoala (Bruna, min.70) y Mariona (Vicky López, min.63).

Árbitra: Díaz García (Canarias). Amarilla a Mariona (11’).

Goles: 0-1, min.21: Patri Guijarro. 0-2, min.24: Oshoala. 0-3, min.29: Aitana. 0-4, min.32: Graham Hansen. 1-4, min.38: Jensen. 1-5, min.58: Graham Hansen. 2-5, min.65: Patri Guijarro, en propia puerta.

Incidencias: Partido de la 28ª jornada de la Liga F disputado en Zubieta. El Barcelona ha vestido de amarillo. Natalia Arroyo ha cumplido su 100º partido en el banquillo de la Real. Aunque no ha jugado, Gaby García ha regresado a la convocatoria tras la rotura de peroné que sufrió en la final de Supercopa.

28ª jornada

No empieza bien para los vascos la 28ª jornada, que por la mañana había dejado el empate del Alavés con el Granadilla (1-1), después de que las albiazules se hubieran adelantado con un gol de Miku. Un disgusto agravado por la inesperada victoria del Levante Las Planas ante el Atlético (0-1), con lo que aventaja ya en cuatro puntos al equipo babazorro. Ha podido ser peor porque el Alhama ha llegado a colocarse con dos goles de ventaja ante el Madrid pero ha acabado goleado (6-2), lo que le deja empatado con el Alavés. Mañana, además, se enfrentan Sporting de Huelva y Villarreal, ambos con un punto más, con lo que al menos uno de los dos seguirá a tiro del Alavés, con ya solo dos jornadas más por delante.

Mañana, por otro lado, el Athletic buscará en Lezama (12.00) su cuarta victoria consecutiva ante un Betis que peleará por la permanencia matemática. Las rojiblancas afrontan el choque bajo mínimos porque Azkona y Bibi se unen en la enfermería a Garazi, Oguiza y Yulema y, además, Zubieta, Elexpuru y Ortega se quedan con el filial, que disputa un partido trascendental ante el Rayo.

Jornada decisiva en 1ª RFEF

Y es que la jornada, penúltima en este caso, puede ser decisiva en 1ª RFEF, donde solo se ha decidido el título del Barcelona B, que no puede ascender, y el descenso de Juan Grande y Córdoba. Falta por decidir qué tres equipos les acompañarán en 2ª RFEF, cuál subirá a Liga F de forma directa y los cuatro que pelearán por el segundo ascenso en el play-off.

Por arriba se la juegan Eibar y Osasuna, empatados a puntos con el Deportivo y con solo un punto más que el Granada y tres más que el AEM. Las armeras reciben al ya descendido Córdoba (12.00), las rojillas a un Oviedo Moderno al borde del desahucio (12.00) y las gallegas a un Juan Grande que también ha consumado el descenso (12.00).

Un destino que espera evitar el Athletic B, que llega a este final de temporada en descenso pero en plena racha, tras enlazar tres victorias. Hace un mes le separaban nueve puntos de la salvación pero hoy son solo dos y precisamente el equipo que marca la frontera, el Rayo, es el que visita Lezama. Lamentablemente a la misma hora (12.00) a la que se enfrenta el primer equipo con el Betis, con lo que los aficionados tendrán que elegir a cuál animar. Si las rojiblancas pierden, descenderán y arrastrarán al tercer equipo –que hoy ha ganado, lo que también le ha permitido salir del descenso–; si empatan, se mantendrán con un hilo de vida y si ganan saldrán de descenso si el Albacete, que recibe al campeón Barcelona, no pasa del empate.