Con motivo del Día Mundial de las Personas Refugiadas, el consorcio de ONG internacionales recuerda «la dramática situación en la que sobreviven 173.600 personas en el desierto argelino», en referencia a los campamentos de Tinduf.
En un comunicado publicado este martes, la plataforma que engloba a 14 organizaciones denuncia el deterioro de la situación humanitaria en los campamentos, levantados hace casi 50 años, agravada por factores como la pandemia y la inflación, lo que ha «impactado sobre los recursos ya extremadamente limitados para una población que subsiste casi exclusivamente de la ayuda humanitaria».
Además, «más de la mitad de niños y niñas saharauis menores de 5 años sufren anemia y la tasa de malnutrición se ha incrementado en 3 puntos entre la población infantil en los últimos tres años»
La plataforma denuncia que «las consecuencias de este conflicto olvidado e invisibilizado recaen sobre la población saharaui vulnerando sus derechos más básicos y arrojándola a una extrema dependencia humanitaria».
Las ONG urgen a la sociedad civil y a la comunidad internacional a «redoblar los esfuerzos que conduzcan a una resolución pacífica del conflicto», así como la necesidad de aumentar los fondos destinados a frenar el agravamiento de esta crisis humanitaria».
En declaraciones a Efe, María Ovejero, de la ONG Mundubat y coordinadora del Consorcio, lamenta que «el olvido al que está sometida la población refugiada saharaui, dificulta la respuesta a sus necesidades básicas y el disfrute de sus derechos fundamentales».
En este sentido, remarca las condiciones extremas en las que llevan sobreviviendo durante casi cinco décadas, que «requieren de una solución urgente del conflicto, y mientras tanto, de un incremento de la ayuda, que ofrezca un respiro a la sofocante situación humanitaria».
Este llamamiento es el tercero lanzado por el consorcio de ONG y las agencias de la ONU en menos de un año ante el deterioro progresivo de la situación humanitaria en los campamentos de refugiados saharauis.