Agentes de la Policía Foral, adscritos al Grupo de Investigación Medioambiental (GRIM), investigan a dos iruindarras por un presunto delito de incendio forestal en el monte Ezkaba de Artika.
Los hechos ocurrieron el pasado 29 de marzo y se conocieron tras la llamada ciudadana al 112 alertando sobre la explosión de fuegos artificiales en las inmediaciones del cementerio de Artika. Hasta el lugar se movilizaron patrullas que pudieron identificar a quienes manejaban la pirotecnia que ocasionó el fuego posterior, que afectó a 240 metros cuadrados de arbustos y pinos, principalmente. La rápida intervención de los bomberos evitó que el incendio adquiriera mayores proporciones, ya que la continuidad del combustible era propicia para su propagación.
La utilización de artefactos pirotécnicos en el medio natural está prohibida por la Orden Foral 222/16 y exige de autorización previa, en un horario concreto, con personal suficiente y equipado para el control del fuego, previo aviso al parque de bomberos de referencia y bajo condiciones climáticas determinadas.
Este último fuego se suma a una serie de incendios forestales que el monte Ezkaba viene sufriendo a lo largo de estos años, por lo que la Polcía Foral recuerda a la ciudadanía que «deben extremarse todas las precauciones cuando se realicen actividades en el medio natural».
Las diligencias propias del atestado han sido remitidas al Juzgado de Guardia de Iruñea y a la Fiscalía de Medio Ambiente y Urbanismo de Nafarroa.