Martxelo Diaz
Aktualitateko erredaktorea / Redactor de actualidad

UPN acusa a Chivite y a sus socios de «traicionar a Navarra» por la planta de baterías

El líder de UPN, Javier Esparza, ha acusado a María Chivite y a sus socios de «traicionar a Navarra» por permitir que la fábrica de baterías no se instale en Landaben, lo que atribuye a «los intereses de la multinacional y Pedro Sánchez», por lo que le negado la etiqueta de progresista.

Javier Esparza, hoy en su escaño del Parlamento navarro.
Javier Esparza, hoy en su escaño del Parlamento navarro. (Jagoba MANTEROLA | FOKU)

Javier Esparza, el portavoz de UPN, ha comenzado su dicurso en el debate de investidura asumiendo el papel de defensor del comité de empresa de Volkswagen ante el anuncio de que la fábrica de baterías no se instalará en Landaben sino en la Ciudad del Transporte en Imarkoain, lo que ha calificado de «el mayor atentado contra el empleo en Navarra».

Por ello, ha acusado a los firmantes del acuerdo programático y a EH Bildu de «traicionar a Navarra y a su futuro».

Esparza ha subrayado que todo ello se debe a que «se han plegado a los intereses de las multinacionales y de Pedro Sánchez, que le debe mucho a Catalunya», por lo que habría prorizado la planta de Martorell.

El líder de UPN ha preguntado a a EH Bildu «qué le van a decir a su gente» cuando se produzcan despidos en Volkswagen.

Asimismo, ha acusado al Gobierno navarro de «conspirar para vender suelo perjudicando a Navarra» y de hacerlo, además, justo después de las elecciones para evitar un posible coste en las urnas.

Por ello, ha acusado a Chivite y a sus socios de ser «un gobierno de retroceso», rechanzado la etiqueta de «progresista» defendida por la candidata.

Oferta «sui generis»

Curiosamente, tras lanzar estas acusaciones, ha insistido en que un acuerdo entre UPN y PSN supera en escaños al acuerdo programático suscrito con sus socios y ha alertado de que la reforma del Amejoramiento puede ir en la línea de las reclamaciones abertzales.

«UPN no será su tabla de salvación cuando le fallen sus socios», ha destacado Esparza, que minutos antes ha señalado que UPN «apoyará todo aquello que refuerce Navarra», citando el TAV, el Canal de Navarra o que «todos los navarros podamos acceder a la Administración al margen de que sepamos o no euskara».

«UPN será exigente con usted. UPN no va a ceder nunca en sus principios y en sus valores, los que nos han hecho ser y seguir siendo el principal partido de Navarra. Ejerceremos una oposición leal con nuestros votantes, leal con Navarra y con España y exigente y severa con usted. Haremos cuanto esté en nuestras manos para evitar el retroceso de Navarra que va a traer su Gobierno con Bildu», ha señalado Esparza.

El nuevo Gobierno, según Esparza, «nace roto tras un bochornoso espectáculo de acusaciones cruzadas, amenazas, puñaladas y baile de sillas» en las negociaciones entre PSN, Geroa Bai y Contigo-Zurekin, y ha asegurado que se ha dado «un ambiente que muestra la nula confianza que hay entre los socios y que anticipa la inestabilidad que va a regir la actual legislatura».

«Lo vivido los cuatro años anteriores va a ser un chiste, una anécdota en relación con lo que vamos a ver. Ha vuelto a rechazar nuestra mano tendida, la mano tendida del principal partido de Navarra, una mano tendida que garantizaba estabilidad en Navarra, en el Gobierno y en los ayuntamientos. Navarra tenía otra alternativa. Y, usted, libremente, la rechazó. Pero no la niegue. De nuevo usted ha preferido a EH Bildu. De nuevo ha optado por lo peor para Navarra. Entregarla al independentismo vasco. Otro error histórico», ha añadido Esparza.

«De nuevo, los navarros y las navarras vamos a pagar con nuestro dinero una estructura de gobierno mastodóntica creada únicamente para satisfacer los deseos y necesidades políticas y económicas de los diferentes socios y que la pasada legislatura nos costó más de 25 millones de euros. Otra práctica superprogresista», ha indicado.

Javier García (PP), preocupado por la influencia de EH Bildu

El portavoz del PP en el Parlamento navarro, Javier García, no ha apreciado «nada nuevo» en el discurso de Chivite, lo que le hace avanzar que el suyo será «un gobierno continuista en las concesiones a los abertzales y en la inacción en temas fundamentales».

No obstante, ha sido histriónico al «tender la mano por Navarra para poder darle a esta tierra la posibilidad de que sus políticas no dependan, o al menos estén lo más alejadas posible, de la izquierda abertzale».

García ha cargado las tintas especialmente sobre el necesario apoyo en forma de abstención que EH Bildu ha anunciado, lo que deja «claro que los abertzales tienen mucho interés en la reelección porque los socialistas, son quienes más están contribuyendo a blanquear a Bildu».

«Ustedes, los socialistas, son los que han otorgado a Bildu lo que siempre quiso tener, el control sobre el acercamiento y los beneficios penitenciarios para los terroristas que han de cumplir condena en la cárcel», y son «el cooperador necesario para que una fuerza disgregadora e inmoral, por no condenar el terrorismo, cada vez tenga más poder y fuerza política».

Apocalíptico Vox

El discurso que ha leído Maite Nosti (Vox) ha tenido tono apocalíptico, acusando al Gobierno de estar formado por «comunistas, seguidores de Sabino Arana y terroristas abertzales» y basado en «el fanatismo climático», que está hundiendo la industria automovilística.

Junto a ello, ha destaca que ha habido un aumento de los delitos debido a la inmigración, que además copa las ayudas sociales mientras que mayores y familias no tienen acceso a ella, a pesar de que «se les ahoga en impuestos».

Ha criticado que en programas de fiestas se haga mofa de la Guardia Civil y que mientras se apoya al euskara no se tienen en cuenta «otros elementos de nuestras cultura», como la tauromaquia o el Camino de Santiago.