Amaia  U. Lasagabaster
Kazetaria, kirol informazioan espezializatua / Periodista, especializada en información deportiva

El Eibar justifica la gestión del mercado con el equilibrio económico y la espantada de Grbic

Amaia Gorostiza se reconoce asombrada con «la falta de compromiso y honestidad» del delantero austriaco, que dejó colgado al club en el último momento. César Palacios considera «suficiente» la plantilla de 22 futbolistas y destaca la continuidad de jugadores destacados.

Amaia Gorostiza y César Palacios en un momento de su comparecencia en Ipurua.
Amaia Gorostiza y César Palacios en un momento de su comparecencia en Ipurua. (Aritz Loiola | Foku)

Amaia Gorostiza y César Palacios han comparecido en Ipurua para analizar el mercado veraniego y la conformación de la plantilla de un Eibar que, con la reducción presupuestaria, pierde posiciones en las quinielas del ascenso. Precisamente la búsqueda del equilibrio económico ha sido uno de los ejes sobre los que se han movido los responsables azulgranas para explicar la sorprendentes gestión del mercado. «En este fútbol actual del control presupuestario hay unos límites salariales que hay que cumplir y nosotros somos muy rigurosos en ese aspecto. Para poder incorporar, hay que sacar jugadores», ha asegurado el Director deportivo. El otro argumento ha pasado por la espantada que protagonizó Adrian Grbic en las últimas horas de plazo.

La presidenta eibarresa ha admitido que «tenemos un grandísimo disgusto por cómo han sucedido las cosas con este jugador», cuya cesión por parte del Lorient parecía atada hasta el último instante. «Nos parece del todo impensable que un jugador tenga esta falta de compromiso y honestidad después de haber dado su palabra. Teníamos en el club los contratos entre clubes redactados y firmados entre ambas partes. Pero en las últimas horas, el chico pegó una espantada que nos parece totalmente fuera de lo normal, es que no cogía las llamadas, ni a nosotros ni a su propio club. Está en su derecho pero estamos asombrados con esta forma de actuar». «Ha sido un golpe duro –ha añadido Palacios– porque habíamos trabajado mucho. Llevábamos semanas preparándolo y lo más difícil había sido la última semana y media para el acuerdo con el club porque con el jugador ya habíamos trabajado todo el tema y todo estaba ok».

Pero el delantero austriaco voló y ningún otro ocupó su lugar. «Intentamos encontrar soluciones ese día y luchamos hasta las doce de la noche con las otras opciones que teníamos y en las que también habíamos trabajado. Pero no pudimos y el disgusto fue grande porque creíamos que era una incorporación importante».

Lo cierto es que el plan A no salió y tampoco se había atado un plan B, pese a que en los días anteriores se había dado salida a otros dos delanteros, Juan Carlos Arana, que se ha marchado cedido al Racing, y Blanco Leschuk, que ya está en Irán tras rescindir su contrato. Lo justificaba el Director Deportivo explicando que los dos estaban en las últimas posiciones, en cuanto a posibilidades de jugar, del ramillete de atacantes con los que cuenta Joseba Etxeberria y que, además, había que aligerar la masa salarial para poder hacer hueco a Grbic.

Una circunstancia extensible, según las explicaciones ofrecidas hoy, al resto de la configuración de la plantilla, que se queda con apenas 22 futbolistas incluyendo a Jorge Yriarte y en la que no se doblan puestos aunque así lo haya asegurado Palacios, que en temporadas anteriores subrayaba la necesidad de contar con equipos amplios para afrontar una competición tan larga y complicada como la Segunda –hace dos años fueron 26 futbolistas incluyendo a Atienza y el curso pasado 24, a los que se sumaron después Arana y, por la lesión de Imanol, Lasure–. Cuestionado al respecto, el responsable deportivo del club ha recordado que «con Grbic hubiésemos sido 23 más los chicos del filial que nos están ayudando. Esto es, dos por puesto más la ayuda del filial. ¿22 te parecen pocos? Es un número normal. Otros años se dieron circunstancias para tener una plantilla más amplia, que tampoco es fácil en la gestión. De todos modos ahora se abre otro mercado con jugadores que están sin equipo. Antes ya tuvimos incorporaciones así como las de Llorente y Lasure. Y nosotros siempre estamos abiertos a ser mejores. Tenemos 22 jugadores más todos los chicos del filial, no es una plantilla corta y tenemos 22 jugadores de máximo nivel, como lo han demostrado en temporadas anteriores».

En realidad no se doblan los puestos. Joseba Etxeberria solo cuenta con tres centrales específicos, Berrocal, Arbilla y Venancio, que no estará disponible en varias semanas tras sufrir una lesión muscular este pasado domingo contra el Leganés. Palacios aseguraba a este respecto que el técnico tiene más alternativas para el puesto que ya se han utilizado con anterioridad, como Sergio, Correa «o los chicos del filial», que no hay que olvidar que milita en 3ª RFEF. Resulta sorprendente que se planteen en el inicio de temporada alternativas que en el pasado se han utilizado en situaciones extremas, por ejemplo cuando la temporada pasada los cuatro laterales estuvieron fuera de combate durante varias semanas. Además, el cambio de posición de Sergio afectaría a un centro del campo en el que tampoco se han acabado de compensar entradas y salidas porque las bajas de Javi Muñoz y Peru Nolaskoain se han cubierto con Unai Vencedor y un Yriarte en el que hay depositadas muchas esperanzas pero que todavía no ha debutado en el fútbol profesional. A lo que hay que añadir las dudas que despiertan Ríos Reina y Correa por sus antecedentes con las lesiones, sobre todo en el caso del extremeño que, de hecho, también está de baja ahora. No lo ve así Palacios, que insiste en que «Sergio puede jugar de central, Correa también… Al final juegan dos centrales. Desgraciadamente se nos ha lesionado Venancio y tienes qye pensar en soluciones pero tenemos 22 jugadores en plantilla y la ayuda de los chicos del filial que están con nosotros, Alday, Aritz, Mada, Odei… entrenan casi todos los días con nosotros y nos dan un soporte más que suficiente».

Como en el caso del delantero, también en defensa se ha llegado a esta situación tras dar salida a futbolistas de la plantilla. Concretamente a Chema, cedido al Alcorcón, y Cubero, igualmente cedido al Racing de Ferrol. Algo que de nuevo, sobre todo en el caso del primero, tiene mucho que ver con los recursos ecónomicos que maneja el club, que había reservado una buena cantidad pensando en Grbic. «Las salidas nos permiten hacer ese esfuerzo económico y hay que tomar decisiones. A toro pasado me dices y sí, ojalá hubiéramos podido solventar otras opciones. Pero en ese momento ya no se pudieron concretar». «Nuestro planteamiento y esfuerzo económico estaba dirigido al delantero. Si vas a hacer ese esfuerzo, quizá no tienes lo suficiente para mejorar el puesto de central u otra posición que puedas mejorar», ha añadido.

Ofertas de Primera

Las apreturas económicas también tienen que ver con la continuidad de hombres importantes. «Dijimos desde el principio que nuestra prioridad era mantener el bloque», han recordado Gorostiza y Palacios, lo que incluye a futbolistas con pretendientes poderosos, a los que el Eibar ha conseguido retener, renunciando a los ingresos que habría supuesto su traspaso. «Desde el primer minuto teníamos claro todos que queríamos mantener el bloque –ha explicado el Director deportivo–. Eso ya te marca que toda la gestión del verano y del mercado no sea sencilla porque ha habido jugadores a los que han llamado equipos de Primera y están con nosotros. Stoichkov, Matheus, Tejero, Luca… son jugadores que han tenido mucho mercado y están aquí y hay que dar valor al esfuerzo de todos por que así sea».

Destacaba Gorostiza que los futbolistas con pretendientes no han «presionado» pero «estaban un poco entre dos aguas. Es que si te viene con una buena oferta un equipo de Primera, es lógico que tu deseo sea jugar en Primera pero con un buen proyecto, cariño… Que los jugadores continúen con nosotros es un grandísimo triunfo». Añadía Palacios que «es lógico que el jugador lo traslade, muestre su inquetud… Yo he sido jugador y lo entiendo y quiero agradecer personalmente a esos jugadores que, entendiéndolos, han entendido también que el Eibar también apostó por ellos muy fuerte en su momento, que han sido y son muy felices aquí y que entendían que a pesar de su disgusto, su nerviosismo, el club también quería defender que eran vitales para nosotros y que queríamos ser fuertes y competitivos. Era fundamental que siguieran y que si no venían con una oferta fuera de mercado no habría traspaso aunque hoy en día parece que cuando un jugador está en su último año de contrato hay que venderlo para sacar rédito».

Junto a los que siguen, Palacios ha destacado los cuatro fichajes que se han realizado –Cristian y, en calidad de cedidos, Konrad, Vencedor y Soriano– que responden exactamente a lo que quería el club. A última hora pudo sumárseles Peru Nolaskoain, que ya vistió la camiseta azulgrana la temporada pasada, cedido por el Athletic. «Esa puerta se abrió el último día –ha confirmado–. Parecía que se iba a ir a otro equipo pero finalmente se queda en el Athletic y el último día se abre esa pequeña posibilidad por la que luchamos hasta el final. Hubo buena predisposición nuestra, del jugador y del Athletic pero no se pudo, hay circunstancias por las que a veces no se puede llegar a acuerdos».

Gritos e insultos

A la espera de si las explicaciones calmarán los ánimos, la gestión de mercado no ha gustado a la afición azulgrana. Tampoco ayuda a encauzar las aguas el arranque de temporada, en el que el Eibar apenas ha sumado tres puntos de doce, lo que le tiene en puestos de descenso. Lícito, no así todas las formas de expresar el enfado. El domingo se escucharon en Ipurua gritos de «directiva dimisión», un clásico del fútbol aunque muy inhabitual en el estadio armero, aunque lo realmente censurable son los insultos que recibió la presidenta. «Que en la cuarta jornada se grite “directiva dimisión” es sorprendente –asegura Gorostiza–. No fue una cosa muy extendida pero por supuesto que escuchamos los gritos. Y yo personalmente recibí numerosos insultos cuando salía del parking, ya a nivel personal. Y claro que duelen. Pero parece que eso es lo que tenemos en este momento a Ipurua. No sé a dónde nos va a llevar porque estamos en la cuarta jornada y es algo que nunca hemos visto. Solo pido que desde luego se apoye al equipo, que necesita todo el apoyo y si no recuerdo mal, también se le pitó. No hay razón para hacerlo, necesitamos un poco de engranaje. No hemos empezado como queríamos pero no quiere decir que vaya a seguir siendo así. Todos nosotros tenemos confianza absoluta en el equipo».

«Tenemos fe ciega en el equipo, lleguemos hasta donde lleguemos», ha insistido, una frase final que ya dejaba dudas sobre el objetivo real que se marca el club –cuyo proyecto de regreso a Primera era inicialmente de tres años– para la temporada, más aún después de que Gorostiza haya añadido que «primero hay que ir a por los cincuenta puntos y luego seguiremos hablando».