Los centros de enseñanza de iniciativa social de la CAV serán escenario de ocho días de huelga que se repartirán entre octubre y diciembre, y con los que los sindicatos convocantes quieren denunciar el bloqueo de la negociación del convenio.

A través de una nota, las centrales denuncian que «tras la jornada de huelga del 25 de abril, las patronales siguen enrocadas en su inmovilismo. Han pasado cinco meses desde la huelga y los sindicatos no han tenido ninguna noticia suya. También han hecho caso omiso de la petición de negociación que les enviaron antes de la huelga».

Ante esta situación, ELA, Steilas, CCOO, LAB y UGT «no han tenido más remedio que reforzar la dinámica de huelga y movilización» con esas ocho jornadas de paros.

Advierten de que si tras estas jornadas de huelga «siguen sin contenidos que posibiliten la firma del convenio colectivo», en enero intensificarán la dinámica de huelga.

En concreto, sus principales reivindicaciones se centran en medidas para «aliviar las cargas de trabajo, mejoras para los sectores más feminizados y precarizados, subidas salariales que garanticen el IPC, medidas para mantener los puestos de trabajo y mejoras para la Formación Profesional». Además, «los planes de euskera, los planes de igualdad y los planes de abordaje de la salud laboral y especialmente de los riesgos psicosociales» también están en el punto de mira de los sindicatos.

Los sindicatos piden la implicación de Lakua

Las centrales piden «a las patronales Kristau Eskola y AICE-IZEA que inicien una negociación real». Y añaden que el Gobierno de Lakua «también tiene qué decir en este conflicto», por lo que ha anunciado que van a solicitar reunirse con el Departamento de Educación para trasladarle la situación de bloqueo.

Recuerdan en su nota que durante el proceso de negociación del nuevo convenio, se han llevado a cabo 13 reuniones de negociación, que comenzaron en mayo de 2022 y la última tuvo lugar el 2 de febrero de este año. Esta concluyó sin fecha para una próxima mesa y «las patronales Kristau Eskola y AICE-IZEA dejaron muy clara su intención de no hacer ninguna propuesta sobre contenidos que permitiese avanzar en la negociación del convenio». De hecho, ese fue el motivo de la huelga realizada el pasado 25 de abril.