Varios activistas de la asociación Alda! han entrado esta mañana en los locales de la agencia Citya Defoly Immobilier, en Biarritz, sitos en la plaza de la Liberación, para denunciar un caso de subida abusiva de alquiler.

La asociación ha recordado que Biarriz figura en la llamada zona tensionada, en la que la Mancomunidad Vasca incluye a un total de 24 localidades, situadas todas ellas en Lapurdi.

En esa zona tensionada los propietarios de vivienda deben de respetar un índice a la hora de aplicar una subida entre dos alquileres.

Los activistas de Alda! defendido con esa acción a una inquilina, Maider (nombre ficticio) que ha debido abandonar su apartamento a raíz de que los propietarios de la vivienda, situada en Donibane Lohizune, esgrimieran su intención de vender el piso.

De la noche a la mañana ha debido encontrar otro lugar en el que vivir, lo que ha hecho que su alquiler mensual pase de 538 a 719 euros (incluidas las cargas), lo que, indica Alda!, «le llevará a una pérdida de poder adquisitivo de 1.572 euros anuales».

La agencia no daba la cara

Tras mostrar su queja a la agencia por aplicar, a su vez, una subida de 23 euros con respecto al precedente inquilino, que ya vio cómo se le endosaba esa subida en diciembre de 2022, esta inquilina recurrió a Alda! que, en vista de la nula receptividad de la agencia, ha optado por una ocupación, a las 9.30 de este viernes.

Con esa acción ha denunciado «ese aumento de alquiler ilegal, que infringe la norma de congelación de alquileres en vigor en la zona tensionada de Ipar Euskal Herria».

A la media hora de ocupar ese local, la responsable de la agencia se ha comprometido por escrito a evocar el caso en una reunión interna, que tendrá lugar el 2 de octubre, y que debería dar paso a la «corrección» en el precio del alquiler pero también a poner en marcha una serie de mejoras en el apartamento, cuyo propietario vive en París.

Alda! anima a los inquilinos que se vean en situaciones similares a contactar con la asociación.