Cientos de personas se han manifestado este sábado a la tarde en Urduliz en contra de los planes de la multinacional Stellantis de cerrar Mecaner y despedir a sus 148 trabajadores. Desde el comité han incidido en que no es «única y exclusivamente» su lucha, sino la de «un pueblo, de una comarca y de la clase trabajadora en defensa de un tejido industrial que cada vez está más mermado por la falta de verdaderas y eficaces políticas industriales en el país».

La marcha –convocada por los sindicatos ESK, LAB, ELA y CCOO, que conforman el comité de empresa– ha partido desde el Ayuntamiento de Urduliz para finalizar en la fábrica de Mecaner tras recorrer cerca de un kilómetro y medio coreando consignas como «Mecaner ez itxi», «Borroka da bide bakarra» o «Gora, gora, gora langileen borroka». A su llegada, se ha producido un intercambio de aplausos entre los operarios y quienes han acudido a apoyarles.

Antes de arrancar la protesta, trabajadores han colocado una pancarta reivindicativa en la edificio consistorial. Este y otros ayuntamientos de Uribe Kosta habían llamado a participar en la manifestación y los alcaldes de EH Bildu han estado en ella.

Eskualdeko herritarrok, Urdulizko herriak babesa emoten Mecanerreko langileei.
Apoyando a los trabajadores de Mecaner.#defendadezagunGUREindustria#mecanerEZixi pic.twitter.com/sUe9JR83Rq

— Itziar Iratzagorria Iturriaga (@ItziarUrduliz) October 7, 2023

Además, este pasado viernes, representantes municipales se entrevistaron con responsables de Industria del Ejecutivo de Lakua para tratar de buscar una solución y evitar el cierre de la emblemática factoría. Hasta el momento, la dirección no se ha reunido con los trabajadores, a pesar de los requerimientos que le han hecho.

El miércoles, de nuevo huelga

La plantilla de Mecaner ha anunciado que van a «luchar no solo contra lo que consideramos que es injusto sino contra una situación que se viene repitiendo en nuestra comarca y en Euskal Herria». En esa dinámica, el miércoles 11 de octubre, llevarán a cabo una nueva jornada de huelga, la segunda después de la del 21 de septiembre. Además, van a mantener una reunión con el Departamento de Trabajo.

Entienden que se trata de «la lucha, compromiso y dignidad de un pueblo por la industria de la comarca, por el empleo y por el futuro. Por ello –han añadido–, es necesario enfrentarse a la multinacional para asegurar que la producción se queda aquí, que los puestos de trabajo se mantengan».

Ante la planta, han agradecido el apoyo que están recabando desde el 1 de septiembre, cuando en el marco del proceso negociador para la renovación del convenio, la dirección de Stellantis les informó de su pretensión de cerrar la fábrica dedicada a la troquelería desde 1961 con un objetivo claro, «aumentar sus márgenes de beneficios, deslocalizando y reduciendo costes».

«Una vez más, la falta de viabilidad y competitividad como paraguas para el cierre de empresas, destrucción de empleo, empobrecimiento y precariedad», han denunciado, recordando que esta multinacional de la industria automotriz obtuvo el ejercicio pasado unos beneficios de 16.000 millones de euros. «¡Hace falta ser muy caraduras para hablar de falta de competitividad con esos beneficios!», han enfatizado.

Mecaner, han subrayado, es un «referente» en Uribe Kosta, «donde generaciones de este pueblo han trabajado. Una fábrica de las ‘históricas’, de las que ya forman parte del paisaje y la historia de una comarca de un pueblo».

El anuncio del cierre de Mecaner lo han enmarcado en la continua desaparición de industrias en Bizkaia, mencionando entre otras a Dismodel, Troquenor, Matricerías Deusto, Cables y Alambres o La Auxiliar Naval. En el caso de Uribe Kosta, además de los cierres, han denunciado la destrucción de empleo industrial y de calidad, citando el caso concreto de Alconza.

Asimismo, han mostrado su apoyo y solidaridad a los trabajadores de Autoglas-Clavista, en Laudio. Han lamentado que la pérdida de peso de la industria convierta a Euskal Herria «en un país de turismo y servicio».

«Avaricia empresarial»

Ante la «avaricia empresarial de Stellantis» y sus planes, han dejado claro que no van a asumir el «futuro negro que nos quieren imponer» y por ello van a luchar.

«Es el momento de encender las alarmas y dar respuesta como pueblo. Desde los y las trabajadoras, pasando por los agentes sociales y políticos, hasta la ciudadanía en general», han propuesto. Además, han vuelto a reclamar al Ejecutivo de Lakua y a la Diputación que asuman su responsabilidad y se impliquen de manera activa en la búsqueda de una solución que permita la continuidad de Mecaner.

Ante la puerta de la fábrica, han dejado claro a la dirección que les van a tener enfrente y que van a luchar hasta el final en la defensa de sus puestos de trabajo. «Tenemos un gran reto y un objetivo claro por delante; revertir la decisión de Stellantis y salvar a Mecaner, garantizando el empleo y el futuro de la planta», han concluido.