La Asociación Gure Sarea, dedicada a investigaciones sobre cuestiones de género, ha exigido este miércoles en el Parlamento de Gasteiz una «voluntad política clara» para reforzar las medidas destinadas a la lucha contra los abusos sexuales contra menores, así como para que el trabajo realizado por la ponencia parlamentaria en torno a este problema no quede «en papel mojado».

La representante de Gure Sarea Maitane Urizar Elorza ha comparecido este miércoles ante la Comisión de Políticas Sociales y Juventud para plantear sus reflexiones en torno al proyecto de ley de la CAV de infancia y adolescencia.

En su intervención, Urizar ha dedicado una especial atención al problema de los abusos sexuales a menores. En este sentido, se ha referido a la labor de la ponencia desarrollada en los últimos años por la ponencia creada en el Parlamento para analizar este problema y plantear soluciones y medidas de reparación para las víctimas.

La representante de Gure Sarea ha destacado el «gran esfuerzo» que realizaron los especialistas y las víctimas que realizaron sus aportaciones en comparecencias ante este foro parlamentario. En especial, ha subrayado el «esfuerzo brutal» que realizaron las víctimas que revivieron el sufrimiento padecido en su día para relatar sus experiencias ante la ponencia, así como las «consecuencias» que padecieron algunas de las personas que prestaron testimonio ante este foro.

Por todo ello, Urizar ha advertido de que estas personas demandan que «el esfuerzo realizado sirva para algo». Por ese motivo, ha reclamado a los parlamentarios «voluntad política clara» para que las aportaciones realizadas en el marco de dicha ponencia no queden «en papel mojado» y para dotar de los recursos necesarios a la lucha contra los abusos sexuales y a las políticas de asistencia y reparación para las víctimas.

«Sin noticias de la formación»

En concreto, ha advertido de la necesidad de poner en marchas medidas formativas «obligatorias», y ha lamentado que aún no se tengan «noticias» sobre los programas anuales de formación para el profesorado contemplados en un protocolo de 2016.

«Tenemos un problema con servicios sociales, con pediatría, con educación, que es la falta de formación; no podemos construir la casa por el tejado», ha afirmado Urizar. Por otra parte, ha lamentado que el servicio Zurekin de atención a las víctimas, que realizaba una labor «muy reseñable» ante la «falta» de juzgados específicos de violencia contra la infancia, haya quedado «desactivado».