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El Ararteko pide a Lakua flexibilizar y homogeneizar la comunicación con menores en la cárcel

Tras las preocupaciones recogidas en su reunión anual con entidades que trabajan en el ámbito penitenciario en Araba, Bizkaia y Gipuzkoa, el Ararteko ha emitido una recomendación dirigida al Departamento de Justicia de Lakua.

La cárcel de Zaballa, en una imagen de archivo.
La cárcel de Zaballa, en una imagen de archivo. (Jaizki FONTANEDA | FOKU)

El Ararteko ha emitido una recomendación en la que pide al Gobierno de Lakua que flexibilice y homogeneice los criterios para la concesión de comunicaciones de convivencia de los presos con allegados o familiares menores y que estos tengan la máxima duración posible.

La oficina del Ararteko ha informado de esta recomendación, que nace de las inquietudes recogidas en su reunión anual con las entidades del tercer sector que trabajan en el ámbito penitenciario en el conjunto de Araba, Bizkaia y Gipuzkoa.

Fruto de la inspección, el Ararteko ha podido comprobar que tanto la duración como el espacio en el que se desarrollan estas comunicaciones de los internos con sus familiares o allegados menores de 13 años son dispares, entre otras cosas, por las condiciones de las infraestructuras de las prisiones de Basauri, Martutene y Zaballa.

Una vez analizada la situación, aconseja en una resolución que se flexibilicen y se igualen las condiciones de concesión de estas comunicaciones en las tres cárceles, para que además tengan la máxima duración posible «sin que ello suponga beneficiar a unos internos más que a otros».

Igualmente, recomienda que estas comunicaciones se extiendan a los menores de entre 14 y 17 años, desde la perspectiva de los derechos de la infancia y de la adolescencia.

Asimismo, plantea al Departamento de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales distintas intervenciones en cada centro penitenciario. En el de Bizkaia, propone que se facilite hace las comunicaciones ad hoc con menores de 18 años.

En el de Gipuzkoa, la recomendación pasa por mejorar las condiciones de las cabinas utilizadas para las comunicaciones y también por hacer posible realizarlas ad hoc con relación a las personas menores de 18 años.

En el centro alavés, el más nuevo de los tres, el Ararteko recoge la recomendación general de extender la aplicación de los criterios de comunicaciones con hijos hasta los 18 años.