Miles de casas de Euskal Herria y del extranjero recibieron en 2021 un libro-calendario-artefacto con la encomienda de que guardasen con mimo ese extraño objeto hasta 2024, año en el que GARA cumple 25 años. Un año de celebración y de orgullo para la comunidad que primero fundó, luego sostuvo y que, a cuenta del expolio, rescató a nuestros medios.
El libro de papel –en la imagen– es una especie de diario que reúne las fechas que van desde 1977, año del nacimiento de ‘Egin’, hasta el año que viene. A estas alturas, hay quien lo ha extraviado en una mudanza y quien le ha dado otro uso –un restaurante de Donostia, por ejemplo, lo usó para hacer las reservas–.
El que lo tenga, que lo busque, porque en él se puede escribir, pintar o pegar recortes o imágenes propias. No hay normas, solo una invitación a usarlo, a hacer algo bonito con él, un ejercicio de memoria.
Quienes no tengan el artefacto en papel, tranquilidad, porque habrá más opciones. La dinámica de Artefaktua tendrá su parte física y su parte digital. En la web que estamos ultimando se reunirán artículos específicos sobre cada día del año, con sus temas y sus protagonistas más relevantes.
En esa página se recogerán también los recuerdos de los y las suscriptoras, sus noticias y comentarios. Se trata de una herramienta descomunal, capaz de recoger miles de aportaciones que alimentarán la memoria de los 17.260 días que van desde el 29 de septiembre de 1977 hasta el 31 de diciembre de 2024, punto final de esta gran acción colectiva.
Mi querido diario
Esta iniciativa no es un ejercicio de virtuosismo periodístico o de nostalgia. Claro que el equipo de GARA hará una antología de lo más relevante ocurrido cada día de estos 47 años de historia. Pero nos interesa la visión de la gente, de los colectivos, de las instituciones. En general, nos interesan las cosas que son importantes para la sociedad vasca.
Nos gustaría que las y los suscriptores compartieran cómo vivieron esos hechos históricos, pero también conocer sus celebraciones especiales o sus experiencias vitales: fotos de familia, de cuadrilla, reencuentros...
Por eso, queremos recoger los recuerdos de quienes alcanzaron una cima o ganaron un trofeo que ilusionó al país. Queremos que los presidentes de los clubes nos lo cuenten, que compartan con nuestros lectores y lectoras esos hitos. Y que los y las aficionadas también los rememoren. Una fotografía, un recorte, una anécdota, todo sirve para ilustrar cómo se ha ido transformando este país durante estas décadas. Queremos recoger testimonio de luchas de todo tipo: huelgas, manifestaciones, juicios, censuras, torturas… Victorias y derrotas; lo que la ciudadanía vasca hizo y lo que le hicieron.
Nos gustaría que las y los suscriptores compartieran cómo vivieron esos hechos históricos, pero también conocer sus celebraciones especiales o sus experiencias vitales: fotos de familia, de cuadrilla, reencuentros… De quienes están y de quienes faltan.
Una visión propia
Mirando la hemeroteca se toma conciencia de que el país sería distinto si ‘Egin’, ‘Euskadi Información’ o GARA no hubiesen estado ahí, sin sus noticias y sus enfoques. Si en la transición digital no se hubiese fundado NAIZ, otras generaciones se habrían descolgado del compromiso para mantener medios independientes. Si no hubiésemos acompañado a nuestra comunidad en el proceso de euskaldunización, ahora no tendríamos revistas o una radio nacional en euskara, y no tendríamos opciones de dar nuevos pasos. El mundo tendría una imagen más sesgada de cómo es la nación vasca y de cuál es su causa.
Sin estos medios de comunicación, se habrían distorsionado algunos sucesos y perdido algunas ideas, habría menos pluralidad y el país se habría empobrecido. La idea central de Artefaktua es enriquecerlo a través de este ejercicio colectivo de memoria.