El Movimiento Feminista de Algorta ha informado del archivo de «la causa para convertir en delito la ayuda a una joven que fue agredida durante las fiestas del Puerto Viejo de 2022».

Dos activistas de ese movimiento acudieron a declarar en octubre de ese año al Palacio de Justicia de Getxo, después de que hubieran sido denunciadas por la Ertzaintza por un presunto delito de «desobediencia grave a la autoridad» por su actuación ese verano al atender a una menor que había sufrido una agresión en fiestas.

Tras ese incidente, ese colectivo aseguró que llevaba años denunciando «todo tipo de agresiones machistas» y que «así lo hicieron también el 13 de agosto de 2022 dos de sus compañeras, siguiendo los protocolos del Gobierno Vasco», sobre los pinchazos que muchas mujeres dijeron que habían sentido en diferentes municipios.

Erkoreka: «Negligencia»

El consejero de Seguridad, Josu Erkoreka, aseguró entonces que durante esas fiestas del Puerto Viejo de Algorta la actuación de dos responsables de una txosna fue «una grave negligencia» y que serían investigadas por obstaculizar la labor asistencial de la Ertzaintza.

Las integrantes del Movimiento Feminista de Algorta le respondieron que habían colaborado con la Ertzaintza para trasladar a la joven afectada hasta la ambulancia, ya que la patrulla de Seguridad Ciudadana enviada para acompañar al vehículo sanitario hasta el recinto festivo no podía llegar a la txosna ante la cantidad de gente que había en el mismo.

Explicaron que dos integrantes de ese colectivo auxiliaron a la joven que había recibido un pinchazo y estaba algo mareada. Llamaron a emergencias para «gestionar el traslado y la atención sanitaria de la joven y, acto seguido, contactaron con la madre», por ser la afectada menor de edad.

Aseguraron que desde el teléfono de emergencias se les puso en contacto con la Ertzaintza, que, por teléfono, les indicó «que llegaría una ambulancia, o en su caso una patrulla, y que esperaran donde estaban».

«Poco después, la Ertzaintza se puso de nuevo en contacto con las compañeras del Movimiento Feminista» para comunicarles que no podía entrar al recinto festivo «y les indicó dónde se encontraba la misma, acordando también con ellas que una de las compañeras, la que había atendido desde el principio a la joven, sería quien la acompañara hasta la ambulancia, junto a los agentes de la Ertzaintza».

«Momentos de tensión y agobio»

En ese instante, continuaba su relato, «policías de paisano, sin identificarse (exceptuando a un policía municipal), irrumpieron detrás de la txosna y se crearon momentos de tensión y agobio tanto para la persona agredida como para las compañeras que se encontraban allí», denunciaron.

Cuando las militantes del Movimiento Feminista «se acercaron a la ambulancia para saber cómo estaba la joven» los ertzainas procedieron «a identificarlas y a decirles que les iban a denunciar por su actuación», lo que el Movimiento Feminista consideró «un montaje».

La denuncia fue interpuesta por la Ertzaintza de Getxo contra dos miembros del Movimiento Feminista de Algorta y hace un mes recibieron la noticia de que el caso se había archivado «al considerar que no hay motivos para que el juez de instrucción abriera un proceso judicial».

Tras conocer ese archivo, el colectivo de Algorta ha valorado la resolución y ha asegurado que «este intento de criminalizar al Movimiento Feminista no prosperará», al tiempo que ha convocado a los medios de comunicación el próximo 27 de diciembre para explicar su análisis de lo ocurrido.