Alrededor del 70% de las víctimas mortales en Gaza desde el inicio de la ofensiva militar israelí el 7 de octubre son mujeres y niños. Según datos de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (Unrwa), cada día 67 mujeres mueren en la Franja. Se estima que al menos 9.000 mujeres han fallecido y muchas más permanecen bajo los escombros.

La falta de alimentos y de agua potable a causa del bloqueo israelí está haciendo estragos entre las mujeres embarazadas, lactantes y niños.

Este 8 de marzo, Día Internacional dela Mujer, la Unrwa denuncia que el 95% de las embarazadas y lactantes en el norte de Gaza sufren pobreza alimentaria «severa». Y al menos 18 menores han muerto ya de desnutrición y deshidratación.

On #InternationalWomensDay, the women in #Gaza continue to endure the consequences of this brutal war.

‼️ At least 9,000 women have been killed, many more are under the rubble.

‼️ On average, 63 women are killed in #Gaza per day - 37 are mothers who leave their families behind.

— UNRWA (@UNRWA) March 8, 2024

«Las mujeres, niñas y niños siempre pagan el precio más alto de cada conflicto»

«La situación en Gaza es catastrófica. Las mujeres, niñas y niños siempre pagan el precio más alto de cada conflicto. Como madre que cuido a mi hijo encuentro formas formas de afrontar la situación. Paso todo el día tratando de encontrar cosas para mi hijo, como leche y comida. En el Día Internacional de la Mujer, mi deseo es que las mujeres palestinas en Gaza tengan una vida pacífica, agua potable, servicios médicos y alimentos suficientes para sus hijos y sus familias», subraya Kloud Jwefil, técnica de Apoyo al Programa de Justicia Económica de Oxfam Intermón, que ha difundido el testimonio de varias de sus trabajadoras en la Franja sobre su día a día.

Fidaa al-Araj, coordinadora de Seguridad Alimentaria, Efectivo y Protección de la citada ONG, ha tenido que desplazarse cuatro veces ya. Ahora vive en Rafah, sin apenas alimentos, agua y servicios médicos.

«Temo por mis hijos en cada momento del día y de la noche. La mayor parte de la noche no puedo dormir imaginando qué pasa si son los siguientes en sufrir el ataque, qué pasa si pierdo a uno de ellos, qué pasa si ellos me pierden a mí. Es un miedo constante que no puedo superar», remarca.

Haya Abdelhadi, técnica de Justicia de Género de Oxfam Intermón, también está desplazada en Rafah. Incide en que «desde las primeras etapas de esta guerra, las mujeres y niños y niñas han sido los más afectados».

Ghada al-Haddad, responsable de comunicación y medios, ha sido desplazada cuatro veces con su familia en los últimos cuatro meses. Actualmente está en el centro de Gaza.

«El Día Internacional de la Mujer debería ser un día para celebrar los logros y el empoderamiento de las mujeres un día para abrazar la diversidad, la igualdad y la fuerza. Debería ser un día para inspirar cambios y romper barreras, para honrar el pasado y mirar hacia un futuro mejor».

«Pero con la guerra –añade– el Día Internacional de la Mujer no tiene sentido. Muchas mujeres en Gaza han perdido la vida. Muchas mujeres han perdido a sus hijos e hijas, a sus padres y madres, a sus maridos, a sus hermanos y hermanas. Muchas han perdido sus hogares, sus recuerdos, sus ingresos».