Díez Antxustegi pasa por los micrófonos de NAIZ Irratia en mitad de una campaña en que está siendo especialmente aclamado en los mítines de su partido. Y pocas horas después de que el CIS dé ganador por primera vez a EH Bildu. Por ahí arranca la entrevista.

¿Qué valoración hace sobre este pronóstico?

La misma que podemos hacer de otras encuestas. Todas prevén que el resultado estará muy igualado. Hay partido. Algunas dan un poco por delante a EH Bildu y otras al PNV. Queda claro que la sociedad vasca tendrá que decidir entre dos proyectos bien diferentes. Hay también espacio para acuerdos... Cuanta más participación haya, yo creo, y lo digo con humildad, que los resultados serán mejores para el PNV.

Se prevé que se ha triplicado el número de personas indecisas, ¿lo ve significativo?

Cuando hay más opciones, es lógico que también existan más dudas. Me parece que esto supone una oportunidad para los partidos, que tenemos aún días para convencer de nuestros proyectos.

Ya se ha celebrado el debate en ETB-1, ¿cómo vio a los candidatos?

Cómodos. Es de agradecer que tanto Imanol Pradales como Pello Otxandiano hayan decidido que el primer debate entre ellos sea en euskara, hay que agradecerlo desde el punto de vista de una persona que ama la lengua. En cuanto al contenido, ví lo mismo que ocurre en otros debates: el PNV está en el gobierno y el resto tienen la necesidad de criticarlo. Pero Imanol estuvo muy cómodo...

Un tono muy diferente al que usa en el Estado español, ¿qué muestra esto? ¿Puede ayudar de cara a la próxima legislatura?

Ese tono es muy de estimar. En política son importantes los contenidos, pero también las formas, que se imponga el respeto. Efectivamente esto no tiene nada que ver con lo que ocurre en España o en Madrid. ¿Puede ayudar a hacer política en la próxima legislatura? Quizás sí, creo que sí. Pero una cosa es que no haya gran tensión entre los partidos y otra que cada uno defienda su proyecto y se contrasten. Y ha quedado claro que hay modelos muy contrapuestos.

En la primera propuesta de la dirección a las bases no aparecía su nombre, son las bases las que lo han propuesto, ¿lo esperaba?

Esperado o no, estoy muy agradecido. Creo que habla muy bien de nuestra estructura y la vida interna del partido. El EBB puede hacer una propuesta pero luego los afiliados no solo pueden hacer también las suyas, sino que tienen que hacerlas. Algunos pueden pensar que nuestro partido está muy jerarquizado, pero no es así. Y creo que más que a mí como persona, a lo que le dieron apoyo fue a una forma de hacer política.

¿Le preocupa, vistas estas encuestas, que ya quede claro que en ningún caso va a haber una victoria amplia del PNV?

No es preocupación, la gente tiene derecho a votar lo que quiera. Pero sí queremos ganar, porque tenemos proyecto de futuro. Ahora lideramos este pueblo y nuestro reto es seguir gobernándolo también en el futuro. ¿Para tener poder? No, para hacer cosas por nuestro pueblo, nuevas ideas...

En el debate de RTVE dijo que echaba en falta un PP moderado. En ese camino, ¿qué tipo de acuerdos podrían surgir?

La sociedad vasca es muy plural, hay abertzales y no abertzales, de izquierdas y de derechas... y los acuerdos entre diferentes son imprescindibles o este país no tirará para adelante. Me da mucha pena que el PP esté en manos de Vox. En Araba, sobre todo, antes representaba otro modo de hacer política. Recibía votos de personas que estaban muy lejos mío, pero era más moderado. ¡Es que gobierna en muchos sitios con Vox! Eso es lo que le quería decir a [Javier] De Andrés.

¿Los acuerdos con el PSE son un freno para las posiciones soberanistas o independentistas?

Nosotros somos muy abertzales, queremos mucho a este pueblo. Ese es nuestro primer paso para hacer política. Pero este país es plural. Al valorar el acuerdo con el PSE, tenemos que decir que ha aportado estabilidad, que ha sido bueno para este pueblo, no solo en la última década sino en los últimos 40. Con todo, en los acuerdos se concretan también los desacuerdos, y está claro que en esas cosas no tenemos posiciones iguales. Cada uno tiene su perspectiva de país y su identidad.

El espectro soberanista ha sido muy amplio y se prevé que lo siga siendo, pero la ponencia de autogobierno está parada. ¿No es una ironía de la vida que esté en el cajón precisamente en este momento?

No me gusta demasiado entrar en politiqueos, pero intuyo que EH Bildu ha cambiado de estrategia y que, desde el momento en que da el apoyo al Gobierno español y se mueve mucho en la política de Madrid, ha empezado a renunciar a reivindicaciones nacionales, o al menos a no darles tanta prioridad. Puede estar ahí una de las razones principales. Hay otro ejemplo: EH Bildu ha aprobado los últimos presupuestos estatales y ninguno de los del Gobierno Vasco. Echo en falta otra actitud por su parte.

¿Cómo ha podido llegar Osakidetza a ser la primera preocupación de la ciudadanía vasca?

Pues porque tenemos problemas, y lo tenemos que decir sin complejos. Tenemos problemas y debemos arreglarlos. Algunos son estructurales, hemos pasado una pandemia... Pero no podemos hacer lecturas catastrofistas, no podemos olvidar que el mejor servicio público sanitario del Estado es Osakidetza, esto lo dicen los datos. Es un tema muy importante y hay que sacarlo de la discusión pública, del barro. Hay que hablar entre todos y arreglarlo porque es la salud de la gente lo que está en juego. 

Yo también quiero que mis padres, mi hermana, mi abuela... tengan la mejor atención cuando van a un centro de salud, y eso no se conseguirá metiendo el tema en la discusión política. Esto se resuelve con acuerdos, con trabajo, con voluntad y con presupuesto, y me gustaría recordar que Osakidetza tiene hoy el mayor presupuesto de la historia y más trabajadores contratados que nunca.

¿No llama la atención que esto se escuche a ustedes, las personas del nuevo «linaje» del PNV, pero no a Gotzone Sagardui o Iñigo Urkullu?

Yo creo que también esas personas han admitido que existen problemas, aunque quizás es cierto que nosotros venimos nuevos y podemos tomarnos otro tipo de licencias. Los problemas se han admitido y además se han puesto medidas para solucionarlos. Siempre decimos lo mismo: somos inconformistas, queremos mejorar este pueblo. Vamos poco a poco reduciendo las listas de espera, los datos muestran que la situación es mejor que hace tres meses, y también estamos mejor que otras comunidades autónomas, pero repito, somos inconformistas y eso no nos importa, lo que queremos es tener la mejor Osakidetza.

¿Qué opina de un museo Guggenheim en la Reserva de la Biosfera de Urdaibai?

En los últimos años, donde más tiempo he pasado es en la política de Araba y es eso lo que mejor conozco. Las cosas que están más circunscritas a Bizkaia las conozco menos. Me gustaría tener más información. Pero cuando hablamos de estos proyectos...

Esta semana nos ha dejado el lehendakari Ardanza y en el documental sobre él que emitieron en ETB veíamos cómo muchos tuvieron una actitud contraria cuando se implantó en Bilbo el Guggenheim. Ardanza y otros tiraron para adelante con firmeza y convencimiento, y creo que hoy todos estamos de acuerdo en que el Guggenheim ha cambiado a Bilbo y a Euskadi entera. Seguramente el Bilbo y el Euskadi que conocemos no serían iguales sin Guggenheim. Siempre hay quien está en contra de los proyectos que resultan interesantes, por interés político o por lo que sea, pero si quien está en la responsabilidad cree que es bueno para el país y el futuro, debe seguir adelante. Dicho esto, repito que no conozco demasiado ese proyecto.

Pues hablando de Araba, esta semana se ha conocido que el Gobierno de Lakua ha rechazado las alegaciones para proteger los Montes de Gasteiz presentadas también por el Ayuntamiento de Gasteiz y la Diputación de Araba, ¿qué opina de ello?

Hay que proteger el medio ambiente, pero hacerlo con sentido. Yo veo bien esa decisión del Gobierno Vasco.