El colectivo ecologista Eguzki ha vuelto a exigir la paralización del proyecto de la Variante Sur Ferroviaria (VSF) después de que el estudio informativo de la primera fase, presentado por el Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, haya obtenido la Declaración de Impacto Ambiental favorable del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, un trazado que contempla la construcción de un viaducto de 175 metros de longitud que atravesará el barrio de Gorostiza, en Barakaldo.

Eguzki ha criticado la posición de PNV y PSE ante este proyecto, incidiendo en la postura de la alcaldesa de Barakaldo, la jeltzale Amaia del Campo, «que en 2015 tildó de 'barbaridad' dicho trazado» y ahora, al acordarse el traspaso de la transferencia de los servicios de ferrocarriles de cercanías a Lakua una vez se finalice y ponga en marcha la Variante, no se ha pronunciado.

«Se acaba de terminar la segunda fase de la millonaria y deficitaria Supersur, que ha dejado un agujero en las arcas bizkainas de millones de euros, pero nos siguen vendiendo la moto de que la Variante Sur Ferroviaria, una infraestructura basada en construir vías de ferrocarril paralelas a la Supersur, mejorará la vida de de miles de vecinos y vecinas de Santurtzi, Portugalete, Ortuella, Trapaga y Barakaldo. Como mucho reducirá las molestias del paso de mercancías, únicamente en Santurtzi», ha manifestado el colectivo.

Gran impacto

Los ecologistas estiman que la construcción de la VSF «va a suponer la pérdida para toda la ciudadanía de un espacio verde para el esparcimiento, un lugar en el que disfrutar de un aire más limpio, así como la alteración del hábitat de numerosas especies, algunas protegidas, que tratan de sobrevivir en un municipio altamente contaminado como el nuestro».

Por ello, desde Eguzki piden a las y los ciudadanos de Barakaldo que muestren su rechazo a este proyecto, que exijan su inmediata paralización y que «castiguen duramente en las urnas» a PNV y PSE «por continuar con el saqueo y destrucción de nuestro municipio y seguir contribuyendo al cambio climático que amenaza cada vez más la vida en el planeta».