En la primera de las tres jornadas de huelga convocadas esta semana en el hospital de Cruz Roja en Bilbo para demandar la negociación de un nuevo convenio y exigir que no haya recortes, los y las trabajadoras se han manifestado este martes desde el hospital de Basurto al de Cruz Roja para representar el goteo de pacientes desde la sanidad pública a la privada. El 90% de la actividad de este centro sanitario, ubicado en Indautxu, está subcontratada por Osakidetza.
La huelga, convocada por el sindicato ELA desde este martes al jueves, reivindica la apertura de un proceso de negociación, frenar los recortes, la recuperación del poder adquisitivo y una jornada anual de 1.592 horas.
Desde la central se ha manifestado que la gerencia «no solo no quiere garantizar la recuperación del poder adquisitivo de la plantilla compuesta por 100 personas trabajadoras, ni homogeneizar la jornada laboral de toda su plantilla a las 1.592 horas, sino que pretende recortar derechos ya adquiridos».
ELA ha advertido que si Cruz Roja sigue sin responder a las reivindicaciones de la plantilla, no se descarta extender las movilizaciones ya convocadas. «La plantilla del centro espera una respuesta pronta y efectiva que ponga fin a la precariedad y garantice la calidad en el servicio a la población», han añadido.