Manex Altuna

El Athletic regresa a Europa por la puerta grande y con una Copa bajo el brazo

El conjunto rojiblanco ha cumplido con creces el objetivo marcado al inicio de curso y se ha clasificado para disputar competiciones europeas después de seis campañas de ausencia. El quinto puesto en Liga, con 68 puntos, y el título conseguido han superado las expectativas más optimistas.

Los jugadores del Athletic celebran el triunfo ante el Atlético con la grada de San Mamés.
Los jugadores del Athletic celebran el triunfo ante el Atlético con la grada de San Mamés. (Aritz LOIOLA | FOKU)

El Athletic ha completado una temporada magnífica al acabar la Liga en quinta posición y levantar una Copa después de 40 años. El título conseguido es un logro histórico, que se ha celebrado por todo lo alto, pero también hay que destacar que el equipo se ha vuelto a clasificar para competiciones europeas tras seis años de ausencia. Era el objetivo marcado al arrancar el curso y se ha cumplido con holgura.

Los 68 puntos obtenidos son la segunda mejor puntuación en la historia del club. Solo se ha superado esa cifra en 2014 con los 70 puntos que otorgaron la cuarta plaza de Champions. Como en aquella temporada, Ernesto Valverde ha vuelto a erigirse en el gran artífice de los éxitos deportivos al reformular un sistema de juego que le ha permitido al equipo encontrar una mayor regularidad para explotar sus virtudes ofensivas y esconder sus carencias.

Valverde ha cumplido con creces el objetivo marcado al inicio de la temporada. (Monika DEL VALLE / FOKU)
Valverde ha cumplido con creces el objetivo marcado al inicio de la temporada. (Monika DEL VALLE / FOKU)

El Athletic se ubicó en posiciones europeas en la tercera jornada y no ha caído de la sexta plaza desde la jornada 12. El ritmo de puntuación ha sido constante e, incluso, le ha permitido coquetear con la Champions. Sin embargo, tras la consecución de la Copa, el conjunto rojiblanco ha experimentado un pequeño bajón comprensible y no ha podido pelear por la cuarta plaza en el tramo final del campeonato. Asimismo, el equipo ha pagado la falta de frescura en ataque cuando se le han acumulado partidos en distintas competiciones. Mejorar en esa faceta será uno de los retos de la próxima temporada.

Si se hace una comparación con la campaña anterior, el paso adelante del Athletic en ataque ha sido evidente. De ser uno de los equipos de la parte de abajo en la faceta goleadora, ha pasado a la zona noble de la clasificación con 61 goles. Es la primera vez que el equipo supera los 50 goles desde 2017, el último año en el que el equipo se clasificó para Europa, también con Valverde.

Asimismo, es reseñable la gran labor defensiva del equipo que se ha simbolizado con el Trofeo Zamora de Unai Simón. Pese a las dudas suscitadas por la marcha de Iñigo Martínez, el equipo ha conseguido dejar la portería a cero en 18 partidos.

La fortaleza del Athletic se ha sustentado en San Mamés, donde tan solo ha perdido un encuentro en toda la temporada. Fue en la primera jornada contra el Real Madrid. A partir de ahí, doce victorias y seis empates en Liga. El equipo ha volado en casa con los hermanos Williams y un despliegue físico impresionante a la hora de presionar a los rivales. Así, ha hecho disfrutar a la afición con auténticas exhibiciones como en el triunfo ante el Atlético en la celebración del 125 aniversario.

De Guruzeta a Paredes

Se puede decir que Valverde ha edificado la versión 3.0 de su Athletic construyendo la casa por el tejado. Desde que tomó las riendas del equipo en su tercera etapa, se ha esforzado por crecer en la faceta ofensiva. La temporada pasada arrancó con aquel triángulo en el medio campo e inició las probaturas ubicando en punta a Guruzeta. Este curso el delantero donostiarra ha roto todos los pronósticos. Con 16 tantos entre Liga y Copa, se ha erigido en el máximo goleador del equipo y también ha ayudado a que los Williams eleven sus prestaciones. Partiendo desde la banda derecha, Iñaki ha logrado 14 goles y Nico ha dado 16 asistencias entre Liga y Copa, a los que hay que sumar otros ocho tantos.

Oihan Sancet ha pasado por más altibajos, aunque ha aparecido en los momentos decisivos como en la final de Copa. El número ocho ha contribuído con seis goles y seis asistencias. La aportación de Berenguer, con siete goles en Liga, también ha sido indispensable para hacer frente a las bajas. El navarro ha ejercido de jugador número doce.

Guruzeta ha sido el máximo goleador del curso en el Athletic. (Marisol RAMIREZ / FOKU)
Guruzeta ha sido el máximo goleador del curso en el Athletic. (Marisol RAMIREZ / FOKU)

Otro de los nombres a subrayar ha sido el de Iñigo Ruiz de Galarreta. El de Eibar retornaba a casa con 30 años y se ha acoplado a la perfección a la propuesta rojiblanca. Le ha otorgado al equipo el equilibrio que necesitaba. A su lado, se ha asentado Beñat Prados. El navarro disputó los primeros minutos como lateral derecho, pero las bajas le catapultaron a la titularidad y no ha desperdiciado la oportunidad.

Vesga también empezó a gran nivel la campaña, aunque ha ido perdiendo el sitio. El medio campo ha sido la zona del campo en las que más modificaciones ha realizado Valverde ya que también han contado con minutos Herrera, Dani García y los jóvenes Unai Gómez y Jauregizar.

El Trofeo Zamora de Simón pone en evidencia el gran trabajo defensivo del Athletic durante la temporada. (Jorge ROPERO / LA OTRA FOTO)
El Trofeo Zamora de Simón pone en evidencia el gran trabajo defensivo del Athletic durante la temporada. (Jorge ROPERO / LA OTRA FOTO)

En cambio, en defensa Vivian y Paredes han tenido que solventar la papeleta en solitario por las continuas lesiones de Yeray. Como admitió el propio Valverde, el club jugó con fuego al no reemplazar a Iñigo Martínez con un cuarto central. Sin embargo, la arriesgada apuesta ha salido bien. Arropados en los laterales por veteranos como De Marcos, Yuri y el comodín Lekue, Vivian y Paredes se han compenetrado a la perfección y han ofrecido un rendimiento extraordinario.

La gran labor desempeñada en la retaguardia se ha visto correspondida con el premio individual ganado por Unai Simón. El portero de Murgia ha demostrado con sus paradas que es un portero de élite mundial y ha completado una Liga espectacular. La competencia con Julen Agirrezabala, que ha sido uno de los baluartes en Copa, ha servido a ambos de acicate para mejorar.

Relevo generacional

Aunque De Marcos ha decidido seguir un año más, las despedidas de Muniain y Raúl García son el ejemplo más claro del cambio de ciclo que se atisba. Capitanes y líderes del vestuario durante años, han ido perdiendo protagonismo de forma evidente. De ser los referentes del equipo a nivel ofensivo, han pasado a ser suplentes habituales. Dani García también ha tomado la decisión de no seguir en Bilbo, al ser la campaña en la que menos ha jugado.

Muniain y Raúl García han finalizado su etapa en el Athletic. (Monika DEL VALLE / FOKU)
Muniain y Raúl García han finalizado su etapa en el Athletic. (Monika DEL VALLE / FOKU)

Quizás no sean las únicas salidas. El club sigue a la espera de Herrera, al que han propuesto continuar. Al mismo tiempo, jugadores como Villalibre, Adu Ares e Imanol pueden contemplar un cambio de aires en busca de más minutos. El ariete de Gernika ha sido el máximo goleador en Copa con seis tantos y ha hecho otros dos en Liga. Por su parte, Imanol se ha visto relegado a ser la tercera opción para el lateral izquierdo y Adu Ares apenas ha contado con oportunidades.

Por último, el joven extremo Aingeru Olabarrieta debutó en el último partido en San Mamés y el central Unai Egiluz jugó con el primer equipo en Copa. El lateral derecho Hugo Rincón ha ido convocado a muchos partidos, pero no ha llegado a saltar al campo.