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Israel avanza en la anexión de Cisjordania y la destrucción de Rafah

El Gobierno israelí está dando pasos hacia la anexión de Cisjordania, ampliando el control sobre la expansión de las colonias de los ministros que reclaman abiertamente la limpieza étnica. A la vez, sigue las operaciones letales contra sus habitantes y avanza en la destrucción de Rafah.

MSF alertó del trauma psicológico de muchos niños «sin ganas de seguir viviendo».
MSF alertó del trauma psicológico de muchos niños «sin ganas de seguir viviendo». (Eyad BABA | AFP)

Mientras bombardea a diario una Gaza ya devastada y endurece también los ataques en Cisjordania con sus soldados y colonos, Israel ha dado un nuevo paso en la anexión del territorio palestino que ocupa. El pasado 29 de mayo, el Ejército israelí publicó una orden por la que transfiere responsabilidades sobre el territorio ocupado a la Administración de Asentamientos, un órgano bajo las órdenes del colono y ministro ultra Bezalal Smotrich.

El titular de Finanzas, con responsabilidades también en el Ministerio de Defensa, controla ahora normas de construcción, gestión de tierras de cultivo, parques y bosques.

Aunque, de hecho, Israel extiende sus colonias desde hace décadas de forma ilegal, la presión de Smotrich y del ministro de Itamar Ben-Gvir (Seguridad Nacional) ya dio un importante impulso a su extensión tras la formación del Gobierno de Benjamin Netanyahu, del que son apoyos clave, y en los últimos ocho meses Israel ha aumentado considerablemente sus colonias y los ataques a poblaciones palestinas.

Ahora, con mayor autoridad sobre la expansión de las colonias, Smotrich y Ben Gvir ven más cerca su propósito declarado de anexionar el área C de Cisjordania –el 60% del territorio, bajo pleno control militar y administrativo israelí–, eliminando las escasas normas legales que se aplicaban.

Sus planes van más allá. Al igual que para Gaza, plantean la limpieza étnica, la expulsión de los palestinos y la ocupación total, sin límites en la violencia que utiliza Israel contra tres millones de palestinos mientras unos 700.00 colonos, buena parte americanos y europeos, ocupan su tierra.

«La idea de que para lograr la paz hay que andar con pies de plomo y seguir mostrando debilidad ante la Autoridad Palestina es un grave error. Esta línea de pensamiento occidental está desconectada de la realidad y ya nos explotó en la cara el 7 de octubre», afirmó ayer Smotrich para criticar a su colega de Defensa, Yoav Gallant, sobre la fuerza usada en Cisjordania. «La única forma de lograr la paz es actuar de forma agresiva y determinada, con la mayor contundencia posible, de forma que podamos matar a la mayor cantidad de terroristas y seguidores, y sacarlos de la zona –dijo–, incluso si eso significa que Tulkarem se parezca a Gaza», en referencia a una de las localidades cisjordanas más castigadas por la agresión israelí.

Un menor de 15 años

Aunque los ministros ultras ofrecen la imagen más feroz de la ocupación, la política del Ejecutivo israelí avanza de facto por la misma senda. Ayer, el Ejército mató de un disparo en el pecho a Naim Abdillah Naim Samha, de 15 años, en una operación militar en la ciudad cisjordana de Qalqilia, en la que los soldados irrumpieron en tiendas y viviendas. En la misma operación mató al menos a otros dos palestinos a los que identificó como «terroristas» y, como es habitual, impidió la entrada de las ambulancias y equipos de emergencia.

Las operaciones del Ejército sionista y los ataques de colonos han dejado más de 550 palestinos muertos, de ellos 135 menores, desde el pasado 7 de octubre, y están destruyendo la infraestructura de sus ciudades y sus terrenos de cultivo.

A la vez, en la Franja de Gaza, ni aplica las pausas humanitarias que anunció ni acata las órdenes de los tribunales internacionales para que detenga el asalto a Rafah. «Toda la ciudad de Rafah es un área de operaciones militares israelíes. La ciudad vive una catástrofe humanitaria y la gente está muriendo dentro de sus tiendas debido a los bombardeos israelíes», denunció su alcalde, Ahmed al-Sofi.

Ataques a las tiendas de desplazados

Israel mató ayer al menos a otras 28 personas e hirió a 50 más en ataques a las tiendas de los desplazados en Al-Mawasi.

La incursión afecta ya a la totalidad de la ciudad del sur de la Franja y las tropas israelíes intensificaron sus ataques en el centro y oeste –en las zonas Al-Auda, y en Tal al-Sultan– destruyendo barrios residenciales y dando lugar a combates cuerpo a cuerpo con milicianos palestinos.

La zonas sur y este llevan bajo ataques desde que los tanques israelíes iniciaron su incursión en la urbe el pasado 6 de mayo, así que toda la urbe es un campo de batalla.

Un coche cargado, entre las calles destruidas de Jan Yunis.

El secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, definió la situación como «un caos total».
Al-Sofi añadió que no queda ningún centro médico funcionando en la ciudad y que los residentes y desplazados –según la ONU quedan unas 65.000 personas, cuando antes de la incursión militar eran 1,4 millones–no pueden cubrir sus necesidades diarias de comida y agua. 

La destrucción es absoluta también en el denominado corredor de Filadelfia, la línea fronteriza con Egipto y, al igual que en el barrio saudí, en el oeste, tropas de ingeniería están volando todas las viviendas e infraestructura, dejando un erial.

Ya son más de 47.000 los gazatíes muertos y 85.600 los heridos, de los que se han recuperado 37.400 cuerpos. Las bombas israelíes mataron también a decenas en la ciudad de Gaza, Nuseirat y Deir el Balah, entre ellos cinco trabajadores municipales del servicio de urgencias.

Además, la falta de comida y agua sigue siendo una cuestión crítica sobre todo en el norte del enclave.
Las supuestas «pausas tácticas» durante algunas horas al día para facilitar las tareas humanitarias que anunció el Ejército israelí no se han cumplido y la entrada de ayuda sigue siendo escasa, según representantes de la  ONU que visitaron a Gaza sin ver ni un día de calma sin bombas que pudiera ser aprovechado.

Solo una ínfima minoría puede comer de forma regular. Muchos lo hacen una vez al día y la escasez de combustible obliga a quemar plástico o leña para cocinar.

Médicos Sin Fronteras alertó del trauma psicológico que sufren los niños gazatíes, con algunos sin ganas de seguir viviendo: «Lo han perdido todo. Han perdido a sus padres, a sus hermanos, su casa, sus juguetes, todo lo que hacía que su vida diaria fuera normal».



Torturas
Hamas pidió a la comunidad internacional y al Comité Internacional de la Cruz Roja que investiguen los casos de torturas en centros de detención israelíes tras nuevos  testimonios de palestinos secuestrados en Gaza al salir de la prisión militar de Sde Teman. Al menos 29 presos han muerto por torturas desde el 7 de octubre.


Líbano
El secretario general de la ONU, António Guterres, alertó de que un solo «error de cálculo» en la frontera entre Líbano e Israel –donde Hizbulah y el Ejército israelí intercambian ataques desde hace semanas-- podría conducir a una catástrofe a nivel regional. «Los pueblos de la región y del mundo no pueden permitirse que Líbano se convierta en otra Gaza», afirmó.


Armenia y Cuba
Armenia se convirtió ayer en el 147 miembro de la ONU que reconoce el Estado de Palestina y reiteró su apoyo a «la solución de dos Estados». Cuba anunció que se suma a procedimiento iniciado por Sudáfrica contra Israel ante la Corte Internacional de Justicia por genocidio.