La oficina del FBI de Pittsburgh ha confirmado que el expresidente Donald Trump –aspirante republicano al cargo el próximo noviembre– sufrió ayer un «intento de magnicidio» por parte de un tirador que fue abatido y que ha sido identificado como Thomas Mathiew Crooks, un joven de unos 20 años vecino de Bethel Park, localidad situada al sur de Pittsburgh.

Trump fue herido en su oreja derecha después de que el francotirador abriera fuego en pleno mitin en Butler (Pensilvania), a unos 70 kilómetros del hogar de Crooks. Tras ser evacuado por los miembros del Servicio Secreto encargados de su seguridad, fue conducido a un hospital y tratado de sus heridas. Una vez dado de alta tomó su avión privado para volar hasta Newark (Nueva Jersey), donde llegó pasada pasada la medianoche, hora local, en aparente buen estado.

George Bivens, teniente coronel de la Policía del Estado de Pensilvania, ha señalado que no puede confirmar todavía que el atacante haya sido un «lobo solitario» y están extremando la precaución con todos los elementos que están investigando relacionados con el tiroteo, incluidos los protocolos de tratamiento de explosivos.

Un asistente muerto y dos heridos críticos

Uno de los asistentes al mitin falleció y dos personas están hospitalizadas en estado grave, según indicó Bivens. Todos son hombres adultos, precisó.

El fallecido es un exbombero llamado Corey Comperatore, de 50 años, simpatizante de Trump. Recibió un disparo mientras protegía a su familia de la ráfaga inicial efectuada por el tirador.

Otras dos personas han resultado heridas por los disparos efectuados por Crooks y se encuentran hospitalizadas en estado crítico, según ha informado el gobernador a media tarde del domingo en Euskal Herria.

Debate sobre la seguridad del acto

El tirador, que fue abatido por efectivos del Servicio Secreto, se encontraba en un tejado fuera del perímetro del acto de campaña, a una distancia de entre 120 y 150 metros de su objetivo, según un análisis de posiciones elaborado por la CNN en base a los informes recibidos.

No obstante, aún son muchos los detalles que se desconocen. En este sentido, el presidente de la Cámara de Representantes, Mike Johnson, ha prometido realizar una «investigación completa de los trágicos acontecimientos».

«El pueblo estadounidense merece saber la verdad. Haremos que la directora del Servicio Secreto, Kimberly Cheatle, y otros funcionarios apropiados del Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y el FBI se presenten a una audiencia ante nuestros comités lo antes posible», ha concluido.

El portavoz del Servicio Secreto Anthony Guglielmi ha replicado a las críticas que los informes de que el equipo de Donald Trump pidió seguridad adicional y ésta le fue denegada son falsos.

En un breve comunicado Guglielmi ha dicho que «hay afirmaciones falsas de que un miembro del expresidente solicitó recursos de seguridad adicional y que fueron denegadas. Eso es absolutamente falso. De hecho, añadimos recursos de protección y tecnología y capacidades ante el aumento del tempo de los viajes de campaña».

Varios analistas han criticado en las principales televisiones del país las medidas preventivas del Servicio Secreto por no tener en cuenta el riesgo que suponían varios edificios de una planta que rodeaban la zona del mitin en un descampado utilizado para eventos agrícolas en la localidad de Butler.

Vídeos en redes sociales muestran a personas señalando al atacante y asegurando que tenía un fusil antes de que comenzara a disparar hacia el escenario en el que Trump llevaba 10 minutos hablando.

Convención Republicana en Milwaukee

El mitin se celebraba justo antes de la Convención Nacional Republicana prevista desde este lunes y hasta el jueves en Milwaukee (Wisconsin), en la que se confirmará la nominación de Trump como candidato republicano.

El propio Trump se ha pronunciado a través de su red, Truth Social, donde ha dado las gracias «al Servicio Secreto de Estados Unidos y a todas las fuerzas del orden por su rápida respuesta al tiroteo» y ha expresado sus «condolencias» a las familias de las víctimas.

«Supe de inmediato que algo andaba mal porque escuché un silbido, disparos y sentí inmediatamente que la bala me atravesaba la piel. Hubo mucho sangrado, así que me di cuenta de lo que estaba sucediendo», ha explicado.

Los asesores de Trump han afirmado que «espera con ansias» la Convención Republicana. «El presidente Trump espera unirse a todos ustedes en Milwaukee mientras procedemos con nuestra convención para nominarlo como el 47º presidente de Estados Unidos. Como candidato de nuestro partido, el presidente Trump seguirá compartiendo su visión de hacer que Estados Unidos vuelva a ser grande», reza una nota de prensa remitida por su oficina.

Tras el incidente, el presidente Joe Biden se ha puesto en contacto con su predecesor en el cargo para interesarse por su estado, según un comunicado de la Casa Blanca. Ha anunciado asimismo que adelantará su regreso a Washington para seguir recibiendo información de las fuerzas del orden, en lugar de pasar el fin de semana en Delaware como tenía previsto.

«Seguiremos firmes en nuestra fe»

Trump ha pedido a los estadounidenses «unidad y carácter» en un nuevo mensaje publicado tras sobrevivir al atentado.

«Solo Dios ha impedido que ocurriera lo impensable. Nada hay que temer, y seguiremos firmes en nuestra fe y desafiantes ante el rostro de la maldad», ha manifestado.

Trump ha aprovechado para dedicar palabras de condolencia al fallecido y los heridos durante el atentado. «En este momento, es más importante que nunca que nos mantengamos unidos y mostremos nuestro verdadero carácter como estadounidenses, manteniéndonos fuertes y decididos y no permitiendo que el mal gane», ha indicado, antes de añadir que, en principio, acudirá a la Convención Nacional del Partido Republicano que comenzará este lunes en Wisconsin, donde verá definitivamente ratificada su nominación como candidato a la Casa Blanca en noviembre.

«Realmente amo a nuestro país y los amo a todos, y espero poder hablar con nuestra gran nación desde Wisconsin», ha señalado.