El gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) ha conmemorado este viernes el 45º aniversario de la revolución que derrocó con la fuerza de las armas a la dictadura de Anastasio Somoza Debayle en Nicaragua, en un evento que contó con la presencia de altos representantes de Cuba, Bielorrusia, Venezuela o Rusia.
Entre esos invitados se encontraban el canciller de Venezuela, Yván Gil; el primer ministro de Bielorrusia, Roman Golovchenko; o el presidente de la Duma (Cámara Baja del Parlamento ruso), Viacheslav Volodin.
También han acudido a Managua el viceprimer ministro cubano, Ramiro Valdés Menéndez; y la veterana activista palestina Leila Khaled, miembro del Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP), y que entre 1969 y 1970 dirigió el secuestro de dos aviones.
«¡No pudieron, ni podrán!», ha arrancado con ese grito la vicepresidenta de Nicaragua, Rosario Murillo, en el acto central de la fiesta sandinista, que se celebró en la Plaza de La Fe, una explanada ubicada a orillas del lago de Managua o lago Xolotlán, bajo un fuerte dispositivo policial.
«¡No pudieron, ni podrán!», «¡Viva Sandino!», «¡Viva el Frente Sandinista de Liberación Nacional!», «¡Viva Nicaragua Libre!», «¡Viva la Revolución Popular Sandinista!», ha mencionado Murillo entre otras consignas.
El 19 de julio es un día de fiesta nacional en Nicaragua que se celebra desde 1980, cuando fue decretado por el primer Gobierno sandinista (1979-1990) para recordar el derrocamiento armado de la dictadura de Anastasio Somoza.
«Sandino vive y la lucha sigue»
La vicepresidenta, que hizo de maestra de ceremonias, ha dicho que festejaban que «Sandino vive y la lucha sigue». «Somos libres y jamás volveremos a ser esclavos», ha proclamado.
«Que no nos vendemos, ni nos rendimos, jamás. Que juntos, unidos, somos esperanza y fe, que vamos adelante y siempre más allá, con la sangre santa de tantos héroes y mártires que guían nuestros pasos hacia el porvenir», ha remarcado.
Murillo también ha saludado a las 700 delegaciones que han participado en los festejos sandinistas, entre los que han acudido representaciones de Angola, Argelia, Bielorrusia, Burkina Faso, Costa de Marfil, Catar, Cuba, Emiratos Árabes Unidos, Federación de Rusia, Ghana, Honduras, Irán, Kuwait, Osetia del Sur, Palestina, China, Sudáfrica, Venezuela, Vietnam, y Zimbabwe.
La dignataria ha destcado «la intensa solidaridad, esa gran fraternidad que lucha y vence, que hemos luchado y estamos venciendo, creando juntos un mundo nuevo, mejor, de alegría, justicia, trabajo, amistad, un mundo de paz».
Cuba rechaza las sanciones contra Nicaragua
Durante el acto, el viceprimer ministro cubano, Ramiro Valdés Menéndez, ha ofrecido un discurso en el que ha rechazado, en nombre del Gobierno de Cuba, «las medidas coercitivas unilaterales impuestas contra Nicaragua por Estados Unidos y otros países», y ha criticado la «grosera manipulación de la realidad de Nicaragua».
Por su lado, el presidente de la Duma rusa, Viacheslav Volodin, ha destacado las históricas relaciones de Rusia con la Nicaragua sandinista, y ha reafirmado su apoyo al Gobierno de Ortega.
En ese mismo sentido se ha pronunciado el primer ministro de Bielorrusia, Roman Golovchenko, que ha dicho que a pesar de que son dos países que están en dos continentes diferentes, los une «la libertad y la victoria».