El grupo Raimundo el Canastero ha dado a conocer que este lunes pasado otros cuatro miembros del colectivo fueron llamados a declarar ante la Policía Municipal de Lizarra por la canción alusiva a la alcaldesa de la localidad. Ello indica que, lejos de aflojar en su persecución ante las protestas ciudadanas generadas, UPN sigue tratando de forzar alguna imputación delictiva.

«A tres de ellos la Policía Municipal fue a buscarlos a casa y, dado que se encontraban de vacaciones, tuvieron que volver a Lizarra», explica la banda en un escueto mensaje. Concluye dando las gracias: «Milesker por las muestras de apoyo recibidas durante estos difíciles días. Gora Raimundo».

Justo antes de las fiestas de la localidad, muy tensadas por el Ayuntamiento de UPN con su ataque a las txosnas, uno de los músicos ya fue citado por la Policía Municipal y se presentó voluntariamente en su comisaría, donde declaró «en calidad de detenido», precisó el grupo ante informaciones de prensa que insistían en que había sido arrestado.

«Evidentemente cómica e irónica»

El grupo ha denunciado en redes sociales que «la persecución que nuestro cantante está siguiendo responde a una estrategia de desestabilización del grupo o muestra la incapacidad de los investigadores para llevar a cabo una investigación medianamente seria».

En una nota previa, el grupo destacó que «el tono de la canción es evidentemente cómico e irónica, no es una muestra de odio ni implica deseo ni incitación a realizar actos violentos durante las fiestas» y subrayó que «refleja el sentimiento de rabia e impotencia que existe en buena parte de la juventud de Estella, que ha visto cómo el modelo festivo por el que han trabajo durante años ha sido sepultado en un abrir y cerrar de ojos». Además, rechazaron «las acusaciones de machismo y amenazas de muerte» contra la alcaldesa.

Posteriormente, UPN intentó frustrar la actuación de Raimundo el Canastero este pasado fin de semana en las fiestas de Tafalla, sin conseguirlo.