César Arrondo
Alkartetxe Federal, República Argentina

Carlos Garaikoetxea no está triste

Referido al artículo del diario “El Correo” que recorre un poco la historia de Eusko Alkartasuna y me trae recuerdos, sobre todo, cuando fuimos en solitario y logramos solamente unos 38000 votos, luego de romper con el PNV, por su incumplimiento del «Plan Ibarretxe» y la consulta. Recuerdo que algunos compañeros querían seguir gobernando con el PNV, y yo humildemente me preguntaba: ¿para qué, con su posición autonomista, es perder el tiempo, o marear la perdiz, o beneficiar a algún interés personal de mantener un cargo en el gobierno PNV-EA? En esa campaña fui a EH y trabajé con mucha ilusión en la campaña electoral, era una época de vacas flacas, pero a su vez, de mantenimiento de las señas fundacionales de nuestro partido y el inicio de la construcción del «Polo Soberanista» que mucha gente no entendió, inclusive de la izquierda abertzale, ya que por sus circunstancias políticas de ese momento, decidió el voto nulo.

A su vez, tuve junto a Sabin Intxaurraga la distinción de participar en varias reuniones (algunas secretas) del Grupo Aria, que fue el laboratorio de posibilidad de entendimiento en un frente electoral, con fines soberanistas, cuyo resultado político fue Amaiur y luego EH Bildu. Es cierto que todos venimos de diferentes familias y que el tiempo dirá si somos inteligentes, de poder formar un Frente Amplio como en Uruguay o una coalición a la chilena, donde todos los partidos mantienen su saludable individualidad dentro del EH Bildu, con objetivos soberanistas. Por lo antes dicho, muchas veces seguro se producen rispideces y lógicas quejas, pero si bien yo no estoy mucho tiempo en EH, confieso que en muchas oportunidades tengo más afinidad política y humana con gente de los otros partidos que integran EH Bildu, sin perder mi referencia de pertenencia a mi partido EA.

No coincido con este periódico unionista o españolista, que creo que solo trata de perjudicar a Eusko Alkartasuna y esto realmente como militante me enoja. En tal sentido, no  creo ni que nuestro querido «Lehendakari Garaikoetxea está triste», ni que algunos amigos de Eusko Alkartasuna añoren un regreso al pasado de alianza con el PNV. En todos nuestros años de historia hemos discutido, a veces con demasiada pasión, pero siempre democráticamente. Quienes se marcharon del partido por no aceptar el resultado de las votaciones, o ser una minoría en las asambleas o congresos, la historia nos demuestra que no tuvieron futuro político, ni como nuevo partido, ni individualmente, apreciando con tristeza en algunos casos, desde muy lejos de EH, que muchos de ellos se han conformado con las migajas que derrama el partido que hoy gobierna en la CAV.

Eusko Alkartasuna ha sido el eje de entendimiento de las fuerzas que hoy forman parte de EH Bildu, y si realmente pensamos en Euskal Herria, con sus más y con sus menos, hoy en la única «herramienta política» con ideas claras en cuanto a la independencia de la patria de los vascos. Así que con humildad de un vasco/argentino le digo al periódico “El Correo” que imagino que «Carlos Garaikoetxea no está triste», que ha sido un magnífico lehendakari para Euskadi, que muchos nos hemos nutrido de sus enseñanzas y humildad, y que tiene aún mucho para aportar a su país Euskal Herria.

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