Enric Vivanco Fontquerni, Barcelona

El periodismo bajo sospecha

El profesor de Ciencia Política, libanés y con nacionalidad americana, Asad Abu Khalil, gran analista de lo que acontece en su país el Líbano, y un gran conocedor de la situación de la tragedia en Palestina, periódicamente escribe artículos sobre las cocinas de los políticos concernidos, que están dibujando, o que han participado en el desastre actual. En un reciente escrito lo dedica al periodista que trabajaba en Al Jazeera, Sami Kleib, cuando en una entrevista señala que el cronista, nunca recibió instrucciones, ni indicaciones. Con esta fina ironía, el profesor redacta: «Yo le creo, pero los medios árabes no funcionan así». Los periodistas conocen las líneas rojas solo al empezar a trabajar. Los líderes de los medios, todos estos que pululan por todos lados, no reciben ninguna orientación, ya que son lo suficientemente listos para conservar sus prebendas. Los que están en la parte inferior del escalafón reciben instrucciones precisas. Pone ejemplos: cuando Arabia Saudí, declaró la guerra a Qatar en 2017, todos los redactores de los medios sauditas, sabían que era necesario vilipendiar a Qatar, de forma idéntica y a la inversa, en los medios qatarís. Los medios de comunicación, incide el profesor, no son más que la expresión de una situación política de un país. Cuanto más se limitan las libertades, más se reduce el espacio de la expresión en los medios. Además, existen controles gubernamentales, y controles sociales. El gobierno puede castigar a los medios si no obedece. En el Líbano, alude que en los medios hay libertad, pero son propiedad de los regímenes del Golfo, o están financiados por los gobiernos de Occidente, Irán, y por organizaciones como Soros. En sus propias carnes, recuerda que en el diario que escribe a lo largo del tiempo le han censurado cuatro artículos. Cualquiera que trabaje en los medios sauditas, o qatarís, no es posible entrevistar a alguien que se opone a ellos. Este esclarecedor artículo redunda que la libertad de expresión en Occidente, en nada difiere de lo expresado por el profesor. Solo hay que repasar lo que se muestra y escribe de los partidos políticos, con su taxonomía frontal de unos y de otros, y las fronteras que defienden los distintos medios de comunicación, como las unanimidades que existen en las guerras en Ucrania, y Palestina. Recuerdo que en el Referéndum, que se hizo en Catalunya, los periódicos europeos, dejaron claro que era un asunto interno de un Estado de la CEE. Ahora utilizan otro argumento respecto a las elecciones en Venezuela. Que lo expliquen.

Atentamente.

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