Escenario habitual de mitines electorales de la izquierda abertzale, el de aquel 19 de mayo de 1991 en el Velódromo de Anoeta de Donostia con motivo de las elecciones municipales será recordado por la sorpresiva aparición de Angel Alcalde, por aquel entonces huido de la justicia española. Su intervención fue recibida con un cerrado aplauso.
Detenido el 2 de agosto de 1988, fue acusado de «colaboración con banda armada». La Fiscalía solicitó 8 años de cárcel. Estando en prisión a la espera de juicio, fue elegido diputado de Herri Batasuna por Bizkaia en reemplazo de Josu Muguruza, muerto en atentado el 20 de Noviembre de 1999 en el Hotel Alcalá de Madrid, donde se alojaban los tres senadores –José Luis Elkoro, José Luis Álvarez Enparantza e Iñigo Iruin–y cuatro diputados de HB –Iñaki Esnaola, Itziar Aizpurua, Jon Idigoras y Josu Muguruza– que, al día siguiente, iban a asistir la constitución del Congreso. Esnaola resultó gravemente herido.
El 1 de diciembre de 1989 el Tribunal Supremo decretó su libertad provisional en virtud de su nueva condición de diputado, pero pidió un suplicatorio al Congreso para juzgarlo y el pleno de la Cámara lo aprobó el 12 de diciembre. Al día siguiente ordenaron su detención.
Así recogió la crónica de 'Egin' la aparición de Alcalde: «En un mitin lleno de sobresaltos y momentos de profunda emoción, la aparición del refugiado y expreso político por una entrada situada al lado de la tarima de oradores hizo que las personas allí congregadas saltasen de sus asientos y mostrasen, incluso con lágrimas en los ojos, su apoyo a lo que supone Ángel Alcalde, un hombre que, después de estar cerca de dos años en prisión, se encuentra actualmente refugiado fuera del Estado español. Las muestras de reconocimiento al diputado abertzale hicieron que los que se encontraban en los asientos más cercanos al estrado se abalanzasen hacia la valla que les separa del escenario donde se encontraba Alcalde».
Antes de salir rápidamente, pudo abrazar a su madre y hermana, presentes entre la multitud.
También acudió la viuda del histórico dirigente abertzale Telesforo Monzón, María Josefa Ganuza. Un centenar de expresos depositaron simbólicamente y en nombre de sus compañeros encarcelados una papeleta con el logotipo de Herri Batasuna en una urna colocada en la tarima mientras la entonces parlamentaria en la Cámara de Gasteiz Maitane Intxaurraga nombraba las cárceles donde se encontraban los presos y los países con deportados vascos.
Regreso a Euskal Herria con el EHNA
Años más tarde, en el marco de la iniciativa Bai Euskal Herriari, Alcalde sería uno de los once exiliados que el 4 de enero de 2003 anunció ante 4.000 personas en el polideportivo Joxean Gasca de Donostia el regreso a sus localidades natales. Lo hicieron con el EHNA en la mano.
En nombre de todos ellos, Alcalde explicó el motivo de la decisión: «Somos vascos, queremos participar en el proceso soberanista y el proceso de liberación nacional nos necesita a todos». «Ha llegado la hora de vivir en libertad en nuestra tierra. Nos corresponde a los ciudadanos vascos construir Euskal Herria sin injerencia ninguna», destacó.
Los exiliados recordaron que «muchos de ellos han conocido la cárcel, la deportación… y muchos otros cayeron en el camino».
En una entrevista con GARA a los pocos días de regresar a Euskal Herria y en medio aún de una gran expectación mediática, afirmaba que la suya era una decisión «muy meditada» y difícil de tomar porque «después de tantos año, no es fácil volver a nuestros pueblos».
Ante la pregunta de cómo le afectaba el regreso a nivel personal, destacaba que «después de tantos años, te queda la inseguridad de cómo encontrarás tu municipio, cómo reaccionará la gente y los representantes políticos. Sabemos que hay un sector bastante amplio de la sociedad que verá con buenos ojos nuestros regreso. Es una decisión que ya hemos tomados y seguiremos. Tenemos ante todo voluntad y con ella se pueden hacer muchas cosas».
En febrero de 2005 volvió a ser detenido en las cercanías de la Audiencia Nacional español donde comparecía su compañera, quien dos días antes había sido encarcelada. El juez Baltasar Garzón acusó a ambos de alojar en su vivienda a un miembro de ETA.
Adiós a Eva Forest, escritora, voz contra la tortura, mujer solidaria
Otro 19 de mayo, pero de 2007, fallecía Eva Forest. Nacida en 1928 en el seno de una familia anarquista en Barcelona, fue un referente cultural. En 1955, mientras cursaba el último año de Medicina, conoció al escritor Alfonso Sastre, con quien se casó. Tras el procesamiento de Sastre por los tribunales franquistas, el matrimonio marchó a París. En aquella época empezó a interesarse por la Sociología. Su primera novela fue 'Febrero'.
En 1962, de regreso al Estado español, fue detenida en una manifestación de mujeres en apoyo a las huelgas de mineros de Asturias. Al negarse a pagar la multa fue encarcelada durante un mes con su hija recién nacida.
Durante el Proceso de Burgos creó en Madrid el Comité de Solidaridad con Euskadi. Unos años después, en 1974, bajo el seudónimo de Julen Agirre, publicó 'Operación Ogro' sobre el atentado contra el almirante franquista Carrero Blanco.
El 24 de septiembre de aquel año fue detenida acusada de colaboración con ETA y pasó tres años en prisión preventiva en Yeserías. En la cárcel escribió 'Diario y cartas desde la cárcel' y 'Testimonio y lucha desde la cárcel'.
En 1979 impulsó la creación del Grupo contra la Tortura y publicó un monográfico sobre el tema en 'Punto y Hora'. En 1990 fundó la editorial Hiru.
En 1998 realizó su primer viaje a Irak tras el que publicó 'Irak, ¿un desafío al nuevo orden mundial'. Su última aparición pública fue tan solo un mes antes de su fallecimiento durante las jornadas organizadas por los ayuntamientos de Irun y Hondarribia a la figura y obra de su compañero Alfonso Sastre.
Su muerte generó una lluvia de mensajes, entre ellas, el filósofo Santiago Alba Rico, la escritora y realizadora de televisión Lolo Rico, la militante histórica de la izquierda abertzale Itziar Aizpurua, el abogado Miguel Castells, el sociólogo Luis Núñez , la periodista Mertxe Aizpurua o el escritor Edorta Jimenez.