Líder de la Velvet Underground y disidente por antonomasia, Lou Reed falleció el 27 de octubre de 2013. Mientras se especulaba con las causas de su muerte, el periodista Pablo Cabeza prefirió centrar el obituario publicado en GARA dos días después en la pequeña historia del autor de clásicos como 'Sweet Jane', 'Heroin' o 'Walk on the Wild Side' con Euskal Herria.
El artífice de esa conexión fue el ingeniero de sonido Jonan Ordorika, embrujado por Reed desde que, a los ocho años, su hermano Ruper llevó a casa el disco 'Transformer' de la Velvet. «Una obsesión casi enfermiza», describió más tarde Jonan, fallecido a su vez en agosto de 2023.
Concierto a concierto, fue creando una relación con Reed y, sobre todo, con Fernando Saunders, bajo de Detroit que le acompañaba en discos y directos. Saunders acabó un día en casa de Ordorika, en Azkarate, donde quedó fascinado por las cuajadas de Betelu. Desde entonces, en cada concierto de Saunders o de Reed en Euskal Herria o cerca, la cita con Jonan y las cuajadas se convirtió en ineludible.
El obituario completo, en este enlace.