El juicio a los miembros de ‘La Manada’ comenzó el 13 de noviembre de 2017 y el 28 de noviembre el caso quedó visto para sentencia, que se hizo pública el pasado 26 de abril, momento en el que todas las partes anunciaron su intención de presentar recursos de apelación.

Así, tanto el abogado de la víctima como la Fiscalía y la representación jurídica de las acusaciones populares (el Gobierno de Nafarroa y el Ayuntamiento de Iruñea) han insistido en sus recursos en calificar lo sucedido como una agresión sexual, mientras que los letrados de los acusados han pedido su absolución al entender que las relaciones sexuales fueron consentidas.

Miguel Ángel Morán, uno de los abogados de la víctima, ha confiado en que el tribunal sea receptivo a los argumentos expuestos en su recurso: «Yo espero que sí; si no a todos, a la mayoría».

Por ello, ha afirmado que son optimistas ante la posibilidad de que el TSJN reconsidere la sentencia. «Yo creo que sí, por lo menos en algunos aspectos», ha señalado.

Por su parte, Agustín Martínez Becerra, abogado de cuatro de los cinco condenados, ha mostrado su «absoluta convicción» de que el tribunal va a atender sus argumentos y «básicamente la sentencia va a ir en la misma línea que el voto particular» -emitido por un juez al fallo del 26 de abril-, que considera «ajustado a lo que realmente ocurrió» tanto el día de los hechos como en el juicio.

«Esperamos y estamos convencidos de que el tribunal no se va a dejar presionar por todos los comentarios de políticos oportunistas que simplemente están intentando obtener un rédito de un asunto del que no saben absolutamente nada», ha denunciado el letrado.

En este sentido, ha señalado que algunos políticos «se permiten el lujo de emitir opiniones y de hacer lo peor que se puede hacer, que es justicia comparativa», que consiste en remitirse a otros casos «que no tienen nada que ver con éste" con una finalidad "populista y oportunista».

Martínez Becerra ha asegurado que, en este caso, «la presión social no está tan presente, salvo por los comentarios expresados por los políticos en relación con esta sentencia».

«Hay que dejar al tribunal que delibere, juzgue y resuelva en función de las pruebas practicadas en el juicio, no en función de los criterios de 'iluminados' que piensan y saben lo que ha ocurrido, pero que ni estaban ni saben en qué términos se ha desarrollado el juicio», ha concluido.