Miles de personas han marchado este mediodía por la Gran Vía bilbaina tras una pancarta con el lema ‘Euskal Errepublika!’ portada por mujeres que ocupan cargos públicos en representación de EH Bildu.

Entre consignas en favor de los presos vascos –a las que luego se han sumado otros referidos a los catalanes–, la independencia y la República Vasca la movilización ha comenzado a recorrer los primeros pasos, condicionada por la presencia del «periodista» Cake Minuesa que, después de participar en un acto en un hotel cercano con la cúpula del PP de la CAV acompañada de Cayetana Álvarez de Toledo, ha tratado de provocar a los independentistas de izquierdas. No lo ha logrado, ya que agentes de paisano de la Ertzaintza le han vigilado para impedírselo y han acabado llevandoselo.

«Euskal presoak etxera», «Independentzia», «Gora Euskal Errepublika» y «Libertad presos politics» han sido las consignas más coreadas desde el Sagrado Corazón a la plaza Elíptica, donde ha tenido lugar el acto final. A la cola de la manifestación, varios cientos de ciudadanos catalanes, algunos residentes en Euskal Herria, pero otros venidos desde el Principat, que han sumado demandas propias a las vascas.

Una vez en la plaza, en un escenario que daba la espalda a la Subdelegación del Gobierno español en Bizkaia, la primera en dirigirse a los manifestantes ha sido la parlamentaria en Gasteiz Jasone Agirre, quien ha reivindicado desde un plano personal su sentimiento republicano y las señas de identidad propias desde su niñez. Ha destacado que era republicana vasca porque ella quiere tomar sus decisiones, incidiendo en la importancia que tiene en vez de que se adopten en Madrid.

En una intervención, en su mayoría en euskara, la abadiñoarra ha finalizado preguntándose: «¿Cómo no vamos a querer tener una República Vasca que cuide de sus gentes? ¿Cómo no vamos a querer poder decidir nuestro propio futuro, poder organizarnos, tomar nuestras propias decisiones sin depender de Madrid y sus miserias?», para sustentar su apuesta por la República Vasca.

La intervención de la portavoz en el Congreso, Mertxe Aizpurua, ha estado marcada en el escenario político abierto tras los útimos comicios. Del acuerdo PSOE-Podemos ha dicho que «abre una ventana de oportunidad para instalar una agenda democratizadora en el Estado español», incidiendo en los 29 representantes de las fuerzas independentistas en Madrid.

«Somos más»

«Somos más y vamos de la mano para defender el derecho de autodeterminación, para defender políticas económicas y sociales que cuiden y protejan a la gente y para conseguir la libertad de todos los presos políticos y refugiados», ha enfatizado la diputada.

«Somos la garantía, la única garantía, de que el Estado avance hacia la democracia. Somos la garantía para que por fin se respeten los derechos de la ciudadanía vasca. La garantía para que de una vez por todas vascas y vascos podamos ejercer el derecho a decidir. La garantía para que se adopten políticas económicas y sociales que pongan en el centro a las personas y no los intereses de las grandes multinacionales. EH Bildu es garantía de democracia, garantía de derechos y libertades y garantía de políticas económicas y sociales que protejan a la gente», ha insistido Aizpurua.

En ese contexto, la usurbildarra ha añadido que ha llegado el momento en que el aspirante a presidente del Gobierno tendrán que pronunciarse sobre sus políticas. «Tendrá que aclarar si es el Sánchez que prioriza el dialogo como vía de solución a los problemas políticas o es el Sánchez de la Ley de Mordaza Digital. O si ese Sánchez va a mantener la condena de la dispersión para los familiares de los presos políticos o si es el Sánchez que va a abordar la raíz del conflicto político que está en el origen de la antidemocracia en la que vivimos en el Estado español», ha expuesto.

A pesar de centrar su discurso en el escenario estatal, Aizpurua ha defendido que el futuro se juega en Euskal Herria, no en Madrid. «Por eso estamos hoy aquí. Y mañana estaremos en Madrid y estaremos donde haga falta. Acudiremos hasta el infierno, si es preciso, por los presos, por la democracia, por la defensa y reivindicación del derecho a decidir, por nuestros derechos económicos y sociales», ha manifestado antes de gritar «gora Euskal Errepublika».