El próximo martes, 25 de octubre, se producirá un eclipse de Sol que se verá en gran parte de Europa, noreste de África y Asia occidental y que en Euskal Herria será visible de forma parcial.
En un eclipse, un objeto astronómico oculta a otro. Desde la Tierra, podemos ver eclipses de Sol (cuando la Luna oculta el disco solar), y de Luna (cuando el astro se interpone en la sombra que la Tierra proyecta en el espacio).
El fenómeno del próximo martes es un eclipse solar que comenzará en el océano Atlántico, cerca de la costa de Islandia, y acabará en el Índico, según datos de la web del Observatorio Astronómico Nacional español (OAN).
En total, durará 244 minutos (algo más de 4 horas), y su máximo será al norte de Nizhnevartovsk, en Rusia, donde se ocultará el 86% del disco solar.
En Euskal Herria al ser parcial la Luna cubrirá algo menos del 10% del sol. El último eclipse solar parcial en el Estado español fue el 10 de junio de 2021; este fenómeno se puede ver con cierta frecuencia, mientras que presenciar un eclipse total o anular es mucho más difícil.
De hecho, el último eclipse anular visible tuvo lugar en 2005, y el último eclipse total fue en 1959, y solo desde las islas Canarias; de hecho, la Península Ibérica no ha visto un eclipse total de Sol desde 1912.
Según los datos del OAN, esta sequía de eclipses está a punto de acabar porque entre 2026 y 2028 se sucederán dos eclipses totales y uno anular que serán visibles desde el Estado español y también del francés.
Cómo ver el eclipse con seguridad
Para observar estos fenómenos nunca hay que mirar al Sol directamente ni usar gafas de sol o remedios caseros como radiografías, películas veladas o aparatos (cámaras, vídeos) e instrumentos (telescopios, prismáticos) que no estén equipados con filtros solares.
Según el OAN, el método más simple y seguro de observar un eclipse es por proyección, con dos cartulinas y en una ventana, situándose de espaldas al sol.
Tan solo hay que hacer un agujero de unos pocos milímetros en el centro de una cartulina (no hace falta que sea circular) y, después, situar la otra justo delante para que la luz pase por el agujero de la primera y se proyecte sobre la segunda.