Los hermanos Arizaleta, Iñigo Sola, Cristina Martínez y Daniel Ulecia han decidido poner punto final a la trayectoria de El Columpio Asesino, casi un cuarto de siglo después de que iniciaran su trayectoria en Iruñea. Un ciclo arrollador y disruptivo en el escenario musical, vasco e internacional, y con hitos inolvidables como ‘Toro’ o ‘Babel’.

Lo han dado a conocer en un comunicado fiel a su estilo: «Pocas cosas hay más emocionantes que estar en una banda de rock, pop o lo que sea que hagan unos individuos que se quieren, subidos a una furgoneta con sus sintetizadores, guitarras y tambores, recorriendo las carreteras allí donde les contraten. Vivir sabiendo que te has salido con la tuya logrando dar esquinazo a una vida en la que una vez te viste atrapado bajo mataderos de uralita».

«Pero todo tiene un fin y el nuestro llegó. Para qué dar explicaciones. Todos sabemos cuando algo acaba en nuestras vidas y debemos aceptarlo», sigue el mensaje.

«Nos vamos. Lo dejamos, pero no sin antes celebrarlo. Porque las cosas pueden acabar bien o mal, y lo nuestro solamente puede acabar como mejor sabemos hacerlo: con una gira de despedida por vuestras ciudades, ofreciéndoos un concierto en el que repasamos toda nuestra discografía. Por eso os invitamos a encontrarnos por última vez en vuestras salas favoritas, quemando la noche. Sudando la noche. Amando en la noche. Porque somos, sois y siempre seremos, amantes en el precipicio. Muchas gracias por todos estos años».

La gira se ha concretado unas horas después. Bajo el título genérico de ‘Amarga baja’, arrancará en Bilbo el 15 de setiembre (Kafe Antzokia), seguirá en Donostia al día siguiente (en Intxaurrondo), tendrá otra parada en Gasteiz el 11 de noviembre (Jimmy Jazz) y concluirá en su ciudad, Iruñea, el 29 de diciembre, en Zentral. Tocarán también en las principales ciudades del Estado español. Como se ve, El Columpio ha optado por recintos pequeños o de medio tamaño en lugar de grandes escenarios.

Un grupo inclasificable y seis discos

Con esta despedida se marcha un grupo clave pese a resultar inclasificable, con su mezcla de rock, punk, pop o electrónica. Deja como legado seis discos: el primero llevaba el nombre de la banda y se publicó en 2003 y el último ha sido ‘Ataque celeste’ en 2020. Entre medio, ‘De mi sangre a tus cuchillas’ (2006), ‘La gallina’ (2008), ‘Diamantes’ (2011) y ‘Ballenas muertas en San Sebastián’ (2014). Los tres primeros con Astro Discos, los dos siguientes con Mushroom Pillow y el último con Oso Polita Records.

A la primera maqueta de 1999 le siguió una quinta posición en el concurso musical Villa de Bilbao y las primeras apariciones en el Festival de Benicasim, uno de los puntales de su carrera.

En este cuarto siglo, cientos, si no miles, de «noches quemadas», desde Euskal Herria hasta México, China, Filipinas o actuaciones en cárceles. Siempre con el impulso de los hermanos Arizaleta, Albaro y Raúl, que han permanecido en la banda de principio a final.