Lo primero que hay que destacar al hablar de este disco es la incorporación a la banda del guitarrista Dann Hoyos. ¿Cómo se ha adaptado el nuevo miembro a la formación?

Después de quince años, estábamos muy acostumbrados a Javi (Javi Puñales), que tenía una forma de tocar la guitarra muy peculiar. Cuando lo dejó, teníamos un ‘marrón’ de la hostia, pero tuvimos la suerte de que Dann, que ya le había sustituido en algunos bolos, decidió unirse a la banda. Como, además, siempre ha sido muy fan de Rat-Zinger, desde el primer ensayo ya venía a ejecutar, porque se sabía todos los temas.

¿Qué ha aportado a este ‘Bala per Cápita’?

Sobre todo, nos ha ayudado a abrirnos musicalmente, porque al no ser músicos, notábamos que ya estábamos empezando a repetirnos un poco sobre los mismos patrones. Estábamos a gusto en este punto, pero ya estábamos haciendo intentos por romper un poco, y Dann ha sido la clave, porque no solo es un musicazo, sino que, además, es fácil convivir con él. Es un tío muy cercano y no tiene ningún aura de ‘estrellita’, aunque sea el puto amo. Como guitarrista, conozco muy pocos que estén a ese nivel, personalmente es lo más bestia que yo he visto, y lo bueno es que sabe muy bien dónde está, a nivel de actitud y a nivel musical, y eso es algo que se agradece muchísimo.

También es importante que nos conocemos desde hace mucho tiempo, porque Rat-Zinger compartimos local de ensayo con Rise To Fall, y por eso todo ha sido tan fácil… ¡y menos mal!, porque nos pilló a dos meses de entrar a grabar, e incluso ha participado en la composición de los últimos temas.

La cosa es que con la salida de Javi, se cerró una puerta, pero se han abierto muchas ventanas… y que quede claro que sigue siendo muy buen amigo, y que, de hecho, ahora nos llevamos mejor que nunca, porque ya no tenemos los conflictos típicos que se producen en cualquier banda.

«A nosotros ya nos han tumbado el canal de YouTube. Pero si desde el principio habíamos sido muy crudos, desde que empezaron con todas estas mierdas, lo somos aún más»

Otro gran cambio en este disco, es que, por fin, han grabado con Oscar Streamline, su técnico de sonido habitual en directo y con quien todavía no habían trabajado en estudio…

Oscar es quien mejor sabe cómo suena la banda y, aunque a lo mejor no es el estudio que más medios tiene, el sonido es mucho más real que si lo hubiéramos hecho en otro sitio. Y si podíamos ir donde nuestro hermano, ¿para qué íbamos a grabar en otra parte? Nosotros no tenemos ninguna necesidad de ‘sobreproducirnos’ en un  estudio con más medios, y ha hecho un curro de la hostia. Yo estoy encantado porque a la hora de hacer el disco, no hace falta decir nada, ya nos conocemos muchísimo y es uno más de la banda. También ha sido la primera vez que, al grabar, veo la cara a los demás en el estudio y eso es muy importante para una banda como Rat-Zinger, que somos como una familia en todos los sentidos, ya que todo se habla y todo se reparte entre todos. Pero esto es lo que queríamos cuando montamos Rat-Zinger: no sólo un grupo de música, sino una banda armada.

Una familia que también tiene su extensión debajo del escenario, con la legión de fans que les siguen allá por donde van, ¿verdad?

¡Joder que sí! Son muy grandes. Te diré que es la primera vez que toco en una banda en la que me encuentro las mismas caras conocidas en todas las partes del mundo donde toco. Gente que ya son colegas, y que se organizan para hacer quedadas, y juntarse antes de los bolos a través del grupo que tienen en Facebook, en el que ya son más de 1.500 miembros.

A pesar de los cambios de los que hablábamos antes, supongo que después de quince años, para una banda como Rat-Zinger ya no habrá mucho más secreto a la hora de hacer canciones que «leña, leña y leña», ¿no?

Sí que es verdad que ya tenemos un bagaje pero, como te decía antes, también queríamos dar una vuelta con temas como, por ejemplo, ‘Berlín’, que hice hace unos diez años. Como la banda no la quiso, yo la tenía guardada para otro proyecto acústico que tengo con Asier de Porco Bravo, que ahora está parado; pero finalmente, esta canción entró en el disco, y la aprovechamos para hacer una cosa distinta. También nos ha servido para aprender que no hace falta ir a toda hostia y gritar y poner mil palabrotas, para que las cosas le lleguen a la gente.

Tenemos muchas ganas de hacer cosas diferentes y para mí todo es Rat-Zinger, da igual que sea ‘Berlín’ que ‘7 delitos en 30 segundos’, que es más cañera… y no tenemos miedo, porque lo hacemos para nosotros, y si nos gusta va para adelante… y si, además, luego gusta a la gente, perfecto. Pero hay un campo amplísimo para hacer cosas, y de hecho, nuestra primera regla es hacer lo que nos salga de los cojones. Si se te ocurre, lo haces y si te gusta es válido.

En cuanto a las letras, siguen en la misma línea combativa y rabiosa de siempre. Tal y como están los tiempos, ¿nunca han tenido miedo a las represalias de los censores de siempre?

A nosotros ya nos han tumbado el canal de YouTube. Está claro que, cuando empiezan con las amenazas y con las condenas a raperos y otros artistas, lo que pretenden no es censurar, sino que nos autocensuremos. Pero si nosotros desde el principio habíamos sido muy crudos, desde que empezaron con todas estas mierdas, lo somos aún más. Querían callarnos la boca y lo han conseguido con algunos, pero con nosotros no podrán porque siempre vamos a ir a la contra.

En un momento en que los curas se follan a los niños, los policías matan a ciudadanos negros y hostian a todo Dios, cuando el sistema es una mierda y los mayores cabrones gobiernan el mundo, ¿me van a tocar a mí los huevos con una letra? ¡No me jodas, no es serio!... Hay gente muchísimo más peligrosa que un músico, y no entra en nuestros planes hacer las cosas de otra manera.

Háblenos de las colaboraciones que, en esta ocasión, han elegido para este disco.

El rock and roll es emocional y, si me caes bien, tu grupo me gustará y me da igual la música que hagas; pero si tú me caes mal, no volveré a escucharte nunca más, aunque tu grupo me molara.
Para nosotros es importante hacer las colaboraciones con colegas que conocemos y admiramos. Por ejemplo, Kutxi es muy fan de Rat-Zinger y muy buen amigo, así que en el momento de hacer “Ya no hay kinkis”, desde el primer momento le escuchaba a él y se lo dije. Con ‘Martillo’, de The Capaces, fue porque vimos que hacía falta una voz femenina que, además es, sin duda, la voz con más pelotas que hay por aquí; y lo de Kosta de Boikot fue casualidad, porque Oscar me dijo que era chelista, y justo nos venía muy bien un chelo en ‘Berlín’. Así que, todo muy bien y estamos muy agradecidos a todos por lo que han aportado.  

«El rock and roll es emocional y, si me caes bien, tu grupo me gustará y me da igual la música que hagas; pero si tú me caes mal, no volveré a escucharte nunca más»

También hay que destacar que no dejan al azar ningún detalle, desde la portada hasta la presentación en vinilo, ¿todo es para la banda igual de importante que las letras y las canciones?

Claro. Nosotros somos de la vieja escuela y lo entendemos así. Por supuesto que también nos adaptamos a lo nuevo y estamos en Spotify, y en redes sociales… pero ¿cómo voy a sacar un disco sin hacerlo en plástico? Siempre hemos cuidado mucho todo, desde la estética hasta los títulos, las fotos, la portada… nada es casual y todo está hecho con mucho mimo. Nosotros entendemos el rock and roll siempre con el cargador lleno, todas las balas pueden dar en el blanco, y por eso intentamos no desperdiciar ninguna.

¿Y ya hay ganas de descargar estas nuevas balas en directo?

Sí, el otro día cerramos el repertorio nuevo de 80 minutos y estamos con muchas ganas de tocarlo, porque, aparte de renovarlo con los temas nuevos, también hemos recuperado otros que hacía tiempo que no hacíamos en directo.