22 SET. 2021 - 14:16h Cascada de Goiuri-Gujuli y salto del Nervión, con el agua como protagonista La cascada de Goiuri-Gujuli y el salto del Nervión son dos propuestas que habría que añadir a cualquier lista de excursiones para realizar en familia, pues ninguna de ellas presenta complicaciones de accesibilidad. El agua es, además, el protagonista indiscutible en ambas visitas. Cascada de Goiuri-Gujuli. Naiz La indiscutible protagonista es el agua en ambos casos. Son la cascada de Goiuri-Gujuli y el salto del Nervión. La cascada de Goiuri-Gujuli La cascada de Goiuri se encuentra en el límite del Parque Natural de Gorbeia, en el municipio de Urkabustaiz de Araba y da nombre al salto de agua del río Jaundia, afluente del Altube. Una vez dejado el coche en las inmediaciones, tomamos el sendero que nos lleva hasta la cascada. El recorrido, de un kilómetro escaso, nos guía entre árboles y atraviesa la pradera, hasta llegar a un mirador habilitado sobre el barranco para observar el desnivel de cien metros que salva el río Jaundia, formando una espectacular cascada, especialmente durante las estaciones más hú-medas del año. Según la mitología vasca, la cascada de Gujuli cuenta con su propia leyenda, según la cual allí habitaba una lamia que se pasaba el día peinando su melena con un peine de oro y un espejo mágico, el cual le concedía deseos. Un día, un pastor de la zona llamado Urjauzi la observó y, al ver sus poderes, esperó un descuido de la lamia para quitárselo. La lamia, desesperada, buscó el espejo por el bosque y el río, pero no lo encontró. Bajó hasta el pueblo para preguntar si alguien lo había visto. Fue entonces cuando encontró al ladrón, descansando con su espejo junto a un arroyo. Se acercó a él, y le prometió que si se lo devolvía, le recompensaría con el tesoro más valioso que Mari podría ofrecer a una lamia. El codicioso pastor accedió, entonces, la lamia le preguntó su nombre, a lo que él respondió: Urjauzi. Y en ese preciso momento, el pastor se transformó en el gran salto de agua de Gujuli, honrando su nombre en euskera y como escarmiento a sus malas artes. Muy cerca de aquí, en la carretera dirección a Izarra, encontramos un lugar no menos mágico: la laguna de Lamioxin. El salto del Nervión El salto del Nervión, con 222 metros de altura, se origina únicamente en las épocas húmedas o de deshielo por la convergencia de los arroyos Iturrigutxi, Ajiturri y Urita. El acceso más sencillo se realiza desde el alto del puerto de Orduña, donde encontraremos la pista señalizada de entrada al Monte Santiago. La pista cuenta con tres parkings habilitados. El primero se encuentra en la entrada misma de la pista; es el más alejado, situado a 9 kilómetros del salto. El segundo, conocido como el de los cipreses, se encuentra en un punto intermedio entre los otros dos. Y el tercero, se ubica al final de la pista forestal, a escasos dos kilómetros. A partir de aquí es obligatorio ir andando. El enclave, enmarcado dentro del Monumento Natural del Monte Santiago, dispone de varias rutas señalizadas PR; la más frecuentada es la ruta circular PR-BU 41 + PR- BU 45 + PR- BU 42, que parte del parking Monde Santiago y se dirige al Mirador esquina de Rubén. , Continuúa al Mirador del Salto del Nervión y vuelve al punto de inicio. Exceptuando la ruta PR-BU 45, que discurre junto al acantilado y salva algún desnivel superior, las otras dos son aptas para toda la familia. El salto del Nervión brinda unas vistas espectaculares en cualquier época del año, si bien, es altamente recomendable elegir las más lluviosas si queremos disfrutar del salto de agua en todo su esplendor. Para finalizar el recorrido podremos visitar el centro de interpretación Casa del Parque Natural del Monte Santiago, donde se puenden conocer detalles de interés acerca de la fauna y flora del entorno. En el mismo lugar podemos encontrar el manantial Fuente Santiago.