30 ABR. 2022 - 00:00h Mendibil, a caballo entre San Fermin y Sarasain Erreka NAIZ En el País del Urumea, a la solana del desconocido Barrengo muinoa, una cima denominada Mendibil se eleva entre las cuencas de San Fermin Erreka (Samin Erreka) y Sarasain Erreka (Sasain Erreka). Lugar de pastoreo ocupado por ganado vario, esta cima ofrece, pese a su modesta altura, unas inesperadas y sorprendentes vistas, que alcanzan, además de los citados valles, la mayor parte de los “ramales” que del Urumea salen a Oriente. Incluso alcanzan Aralar y Aizkorri por un lado, y el gigante Auza por el otro. Si bien es más conocido el acceso a esta cima desde Leitzalarrea, en nuestra propuesta remontaremos y descenderemos uno y otro valle. Pese a la modesta extensión de ambas, la pluviometría del lugar ofrece al visitante todos los verdes imaginables, constituyendo las primeras aportaciones de consideración que el Urumea por su margen izquierda, recibe antes de Goizueta. Aguas arriba de las antiguas minas de Ollin, de la misma carretera parte una pista (en cuyo cruce dejamos el coche) que sobre un puente pasa a la otra margen del Urumea y que marcará nuestra dirección. Aquí, Samin Erreka, canta a nuestra derecha varias centenas de metros, de tal modo que sin hacer caso a una pista que desciende por la izquierda, alcanza una borda con cruce a direcciones varias. Dejando la borda a nuestros pies y a la izquierda, el camino se inclina por la máxima pendiente al frente, y por un atajo a la derecha en curva, alcanza una nueva borda, donde giraremos a la izquierda. Ésta es la primera de una serie de cinco bordas, que sobre plano aparecen alineadas, conectadas por senderos en tramos ascendentes y otros llanos, debiéndose alcanzar por derecha o por la izquierda todas ellas. Quería destacar aquí y ahora la última, donde unos enormes cerezos también alineados marcan la dirección que debemos tomar, antes de que la salida del bosque permite visualizar el collado de Labate. Una vez en el collado en terreno despejado, girando a derecha esperan los poco más de 100 metros de ascensión hacia Mendibil. Mendibil, interesantes vistas, a caballo entre valles (1h20´). Iniciamos el descenso por la izquierda y perpendicular a la subida, primero entre pastos, luego entre helechales con piedras bajo ellos, a la vez que somos testigos de la llegada de alguna pista que no va más allá, hasta que alcanzamos el fondo de valle, Sasain iturri, junto a una pista que en descenso por la izquierda se dividirá en dos. Tomando la más descendente diestra, nos acercaremos a la erreka, presada más adelante y por encima de la presa, veremos que el caudal se divide entre el cauce principal y el del canal. Pegados al canal continuamos, mayormente entunelado, en tramos de sendero o caminos varios, con algún pequeño estrangulamiento en ocasiones, mientras que en otras ofrece pintorescas estampas, que incluyen demoliciones sobre la roca, que hoy en día, sin embargo, están totalmente naturalizadas. Con el paso del tiempo y del espacio, y siempre junto al canal, (no lo vemos pero está debajo), el canal aparece y almacena una creciente lámina de agua que más adelante, en curva a derecha, ofrece una ventana al gigante monte Erakurri al frente. Es este el punto donde debemos salirnos del canal, y por sendero que desciende por la izquierda y por cordal, continuamos hasta alcanzar la perpendicular de una borda, que decenas de metros debajo, veremos aparecer por la izquierda. Cuando este sendero se aproxima a una loma estrecha, el sendero gira a la derecha, y desciende estrecho bruscamente, hasta alcanzar el Urumea. Donde el sendero se ensancha y el Urumea se estrecha. Varios metros aguas arriba, decidimos atravesar de lado a lado y de roca en roca el río (aquí de 3 metros de anchura). De este modo alcanzamos la carretera de Goizueta-Leitza. Y por ella en descenso, engullidos por la gran foresta y el estrecho valle, amenizados por las diversas cascadas, tras 2 ilómetros, alcanzaremos el coche (3h 30´).