En la era de Instagram y TikTok, el fenómeno del “agotamiento de la belleza” está en su máximo nivel. El retinol es nuestro nuevo mejor amigo, seguimos rutinas de 10 pasos y, si no te brilla la piel, no eres nadie. Como respuesta a la velocidad del algoritmo de las redes sociales, y al flujo interminable de cosméticos producidos en masa que lo alimentan, en 2015, Alice Wells y Jennifer Francis dejaron la industria de la moda y fundaron Kindred Black, una marca de “Slow beauty” construida sobre los pilares del diseño artesanal. Una década después, Kindred Black es ahora un nombre de culto para conocer, amado por sus formulaciones de pequeños lotes hechas con ingredientes inusuales de cultivadores especializados de todo el mundo, a través de fragancias, maquillaje, cuidado del cabello, bienestar sexual y más. Cada producto está contenido en recipientes recargables, elaborados con exquisito vidrio soplado a mano; herramientas, como cucharas, espátulas, cepillos, pinzas, palos para el cabello y objetos para realizar masajes faciales, se rondan en materiales como plata, obsidiana y madera. Alejándose todo lo más posible de una estética coreana, Kindred Black continúan avanzando hacia esa “belleza lenta”, adentrándose en los reinos de la producción a medida. Su nueva colección Marcello, comprende un trío de botellas de tocador de vidrio con labios y tapones invertidos en forma de lágrima, que se puede llenar con lo que el cliente desee: perfumes, aceites, bálsamos, sueros o lubricantes. Pero mi favorita es la colección Talismán: recipientes negros brillantes hechos a medida con tapones escultóricos de plata de ley. Os dejo la web para que disfrutéis. https://www.kindredblack.com/

Sisto

Con solo seis paneles de madera, el diseñador Edoardo Lietti propone un sistema de mobiliario versátil, sostenible y poético en su sencillez. Sin necesidad de tornillos ni herramientas, las piezas se ensamblan mediante cortes y ranuras para convertirse en estanterías, bancos, mesas o escritorios, según lo que el espacio -y quien lo habita- necesite. Este concepto, minimalista y funcional, responde a las exigencias del habitar contemporáneo: espacios más reducidos, estilos de vida móviles y una necesidad creciente de flexibilidad sin renunciar al diseño. Lietti demuestra que con inteligencia formal y materiales nobles, el mobiliario puede ser ligero, evolutivo y lleno de posibilidades.

https://www.edoardolietti.com/

La silla con alma

En un mundo donde el diseño muchas veces se reduce a funcionalidad y producción en masa, el diseñador argentino Daniel Alú nos plantea una pregunta simple pero profundamente evocadora: ¿Y si las sillas tuvieran alma? Su colección Sentatas no solo responde, sino que lo hace con una sensibilidad conmovedora y una visión que mezcla escultura, memoria y emoción. Las sillas de Alú no se conforman con ser estructuras que sostienen cuerpos. Son piezas que parecen tener gesto, carácter, incluso humor. Algunas se arquean tímidamente, otras se estiran con orgullo o se recogen en una especie de recogimiento melancólico. Son sillas que hablan de lo humano desde la forma, como si contuvieran las historias de quienes las han habitado -o de quienes aún no han llegado-. Fabricadas con estructuras de acero reciclado y tableros de madera reutilizada, las dos sillas se juntan maravillosamente. Una es opaca y azul intenso, simbolizando el cuerpo de la silla, mientras que la otra es transparente y de color azul claro, lo que implica el alma de la silla. Para mostrar que el cuerpo está, de hecho, muerto, la silla opaca parece que se está doblando bajo su propio peso, colapsando hacia el suelo con las patas traseras dobladas. Mientras tanto, la silla del alma se eleva de ella, perfectamente equilibrada de una manera que todavía hace que sea fácil sentarse en ella. Cada silla nace de un compromiso ético con el medioambiente, pero también con el acto de crear con propósito. No hay dos iguales, y ahí está gran parte de su encanto: en una época que tiende a lo uniforme, estas sillas son pequeñas obras con alma propia, con imperfecciones que cuentan, con curvas que emocionan. Alú imagina sus sillas como entidades con emociones: sensibles, inestables, a veces exuberantes, a veces frágiles. Y, al hacerlo, nos recuerda que el mobiliario también puede hablar de nosotros mismos, de cómo nos sentamos, de cómo ocupamos el espacio, de cómo sentimos. The Soul Chair no es solo una colección, es una invitación a mirar los objetos con otros ojos. A pensar que incluso una silla puede tener voz, presencia, memoria. Y sí, también alma. @muddycap

A45

En el diseño contemporáneo, lo modular ya no es solo una opción: es una filosofía. Así es. Ha costado pero ya lo tenemos integrado en nuestras vidas. ¡Qué remedio! Con el precio de la vivienda por las nubes, cada vez vivimos en espacios más reducidos. El estudio Parafernalia lleva lo modular a una nueva dimensión con A45, un sistema de asientos versátil, inteligente y visualmente sobrio, pensado para adaptarse a todo tipo de espacios y usos. A45 se compone de un conjunto de elementos básicos -asientos, respaldos, brazos y conectores- que pueden combinarse libremente para crear desde una silla individual hasta configuraciones colectivas más complejas. Su nombre hace referencia al ángulo de 45°, clave en las uniones, que le aporta carácter visual y facilita el ensamblaje. Diseñado para entornos contemporáneos que cambian constantemente -oficinas dinámicas, espacios colaborativos, hogares flexibles-, A45 apuesta por una estética limpia y materiales resistentes, sin perder el confort. Una propuesta modular que demuestra que el buen diseño no solo debe ser bello o cómodo, sino también capaz de evolucionar con nosotros. https://parafernaliaa.com/