HELENA SALAS & CARLOS PATIñO
PILATES

Estirar la región inguinal

El objetivo de este ejercicio es realizar un estiramiento activo de la región inguinal, ayudando a relajar las tensiones en esta zona. Es un estiramiento estático, en el que hay que tratar de relajarse. Está indicado para personas de cualquier edad y también para deportistas con problemas inguinales. También se estira la parte inferior de la espalda. Después de realizar este estiramiento, resulta más fácil sentarse con las piernas cruzadas.

Nivel: Básico

Posición inicial: Sentado con las plantas de los pies juntas, dejando que las rodillas se abran. Rodea con las manos los dedos de los pies.

Ejecución: Inclina suavemente el tronco hacia delante, doblando el cuerpo a la altura de la cadera hasta sentir cómo se estiran las ingles. Permanece en esa posición durante veinte o treinta segundos.

Puntos clave:

- Es muy importante no iniciar el movimiento desde la cabeza y los hombros. El cuerpo se tiene que doblar a la altura de las caderas.

- No coloques los talones demasiado cerca de las ingles. Busca una posición cómoda, alejando un poco los pies, que te permita inclinarte hacia delante.

- Coloca los codos por fuera de las piernas para conseguir un mayor equilibrio.

- Dirige la mirada hacia el suelo para no cargar la zona cervical, pero evita que la cabeza caiga.

- Los hombros deben estar relajados y alejados de las orejas.

- Al inclinar el tronco hacia delante, contrae suavemente la musculatura abdominal llevando el ombligo hacia dentro y hacia arriba para aumentar la flexibilidad.

- Respira de forma relajada para ayudar a eliminar la tensión en las ingles.

Variaciones:

- Sentado con la espalda recta apoyada en una pared, las plantas de los pies juntas y las manos apoyadas en la parte interior de los muslos, justo por encima de las rodillas. Empujar suavemente hacia abajo durante veinte o treinta segundos.

- Si la región inguinal está muy tensa y apenas se pueden separar las rodillas, conviene estirar una ingle y después la otra. Se sujetan los pies con una sola mano y con la otra, colocada en el muslo justo encima de la rodilla, se presiona hacia abajo para estirar ese lado de la ingle durante 15 segundos. Repetir después al otro lado.

Si tienes algún problema en la columna o algún trastorno de salud consulta con tu médico o fisioterapeuta antes de realizar estos ejercicios.