Uno de los discos más esperados de esta temporada es el nuevo álbum de Whitney, la banda liderada por Julien Ehrlich y Max Kakacek, que presenta “Forever Turned Around”. La inquietud como metáfora, se instala en el centro del resonante y sorprendente nuevo disco. Tanto Julien Ehrlich como Max Kakacek se han dado cuenta de que la vida puede girar drásticamente: las prioridades cambian, las relaciones evolucionan, el hogar puede llegar a convertirse en un lugar lejano e incluso cuando la suerte se pone de cara todavía se da esa búsqueda de querer encontrar algo mejor. Los productores Bradley Cook (Bon Iver, Hand Habits) y Jonathan Rado (Weyes Blood, Father John Misty) les han ayudado a dar color a los arreglos y el álbum se terminó de completar cuando banda y productores se reunieron con el guitarrista Ziyad Asrar en su estudio de Chicago, el mismo lugar donde concibieron gran parte de “Light Upon The Lake” (2016), su disco de debut.

Porque si bien el éxito de aquel debut los desarraigó de Chicago, su ciudad, también sirvió para fortalecer la relación entre ambos músicos. «Nuestra amistad nos ha mantenido a pesar de que han sucedido muchas cosas desde que comenzamos con la banda», explica Ehrlich. Su vínculo ha sido constante, apoyándose mutuamente para superar episodios de angustia, pérdida e incertidumbre.

“Forever Turned Around” plasma precisamente la aceptación de que el tiempo es limitado. A través de diez canciones, Ehrlich y Kakacek navegan escépticos pero de forma suelta y magistral sobre temas que tratan cuestiones como la mortalidad, la duda, el amor o la amistad. Es un álbum de pop que reivindica la unidad –sea romántica, familiar o comunitaria– siendo la amistad el nexo de unión de unos temas que abordan la maravillosa confusión que surge al ver cómo las cosas van cambiando según va pasando el tiempo. En este trabajo se habla sobre las relaciones, de cómo evolucionan o se tambalean y cómo la soledad puede arrastrar a cualquiera de forma repentina. Ahí está el tema que abre el disco, “Given Up”: lo que comenzó como un guiño a Neil Young en una tarde cualquiera, se convirtió en una canción desgarradora sobre los altibajos de las relaciones a largo plazo. «En una relación, no te quedas en el mismo nivel todo el tiempo. Pasas por periodos en los que emocionalmente te encuentras menos motivado», explica Ehrlich. La penúltima canción, “Friend of Mine”, captura este sentimiento. La felicidad puede ser fugaz pero este álbum demuestra que, a pesar de la incertidumbre y de la inquietud, cuando parece que las cosas pueden ir mal, a la vuelta de la esquina siempre hay un flotador para mantenerse a salvo.

CD AIPAGARRIA

PP Arnold

“The New Adventures Of... PP Arnold” •&flexSpace;Earmusic, 2019 •&flexSpace;Pop/soul

PP Arnold llegó a Londres el 23 de setiembre de 1966 para actuar con los Rolling Stones. Era conocida por ser una de las cantantes de Ike y Tina Turner (The Ikettes) pero no sabía que su mundo estaba a punto de ponerse patas arriba. La tímida pero vivaz joven de 19 años llamó la atención de Mick Jagger, quien la persuadió para quedarse en Londres y grabar como solista, lo que finalmente la llevó a tener una fructífera carrera en la que ha colaborado con los grandes, desde Jagger hasta The Small Faces, pasando por Rod Stewart, Barry Gibb y Eric Clapton, Nick Drake, Peter Gabriel, Roger Waters, KLF o Paul Weller. Cinco décadas después de que se convirtiera en un icono de los 60 con éxitos como “The First Cut Is The Deepest” o “Angel Of The Mornin”, la cantante de soul lanza un álbum doble de material nuevo con colaboraciones de artistas como Paul Weller, Steve Cradock, de Ocean Color Scene, o The Specials, entre otros.