Tras 451 sesiones y coincidiendo con el cambio de año, nuestra sección se despide con una última entrega centrada en los beneficios de la práctica de Pilates.

Esperamos que haya resultado útil tanto para quienes no conocíais el método Pilates, como para quienes ya lo practicabais, y os haya servido para profundizar en esta disciplina.

Os queremos dar las gracias por vuestro interés y fidelidad a todos los lectores que habéis seguido esta sección y un agradecimiento especial a todo el equipo de 7K, por lo fácil y agradable que ha sido trabajar con ellos.

Como ya sabéis, Pilates es mucho más que una actividad física. El método creado por el alemán Joseph Hubertus Pilates a comienzos del siglo XX, combina elementos del yoga, las artes marciales y la danza, con pautas concretas de respiración, control mental y alineación postural. A este sistema de acondicionamiento físico y mental, su autor lo denominó Contrología y él mismo lo definió como «la ciencia y el arte del desarrollo coordinado del Cuerpo-Mente-Espíritu a través de movimientos naturales bajo estricto control de la conciencia».

Una de las grandes ventajas de este método, que sigue siendo utilizado por muchos fisioterapeutas para la rehabilitación de sus pacientes, es que se puede adecuar a personas de todas las edades y niveles de condición física, desde ancianos, niños y mujeres embarazadas hasta deportistas de cualquier disciplina. Es un excelente complemento para quienes practican actividades aeróbicas como el ciclismo, la natación o el running.

Sus beneficios para la salud y el bienestar son innumerables. Citamos algunos de ellos:

- Mejora y corrige la postura, haciendo especial hincapié en la correcta alineación de la columna.

- Favorece un mejor sostén de la estructura ósea. Al fortalecer y tonificar la musculatura profunda del abdomen y los músculos de la espalda, piernas y glúteos, la columna vertebral está más protegida.

- Aumenta la fuerza y también la flexibilidad muscular gracias a los ejercicios de estiramiento y elongación.

- Desarrolla el equilibrio y la coordinación motora.

- Ayuda a la rehabilitación y prevención de lesiones.

- Favorece el control muscular y la conciencia corporal (propiocepción), mejorando la concentración.

- Oxigena el organismo a través de una adecuada respiración.

- Ayuda a eliminar toxinas al acelerar el metabolismo.

- Mejora la circulación sanguínea y el bienestar general.

- Relaja y reduce el estrés.

- Permite entrenar sin riesgo ya que es una actividad sin impacto, que trabaja todos los grupos musculares y permite tonificar la musculatura sin riesgo de lesiones.

- Aumenta la resistencia física.

- Moldea y estiliza la silueta, definiendo los músculos sin aumentar en volumen.

En resumen, es un gran aliado para nuestra salud, por lo que os animamos a que sigáis practicándolo.