Jone Buruzko
IRUDITAN

El templo interminable

(Pau Barrena AFP)

Esta espectacular fotografía da idea de la belleza que encierra el interior del Temple Expiatori de la Sagrada Família, en su denominación en catalán, más conocido como la Sagrada Familia a secas. Se trata de una obra infinita y todavía inacabada, enclavada en el corazón de Barcelona, cuya construcción abarca de momento los 140 años. Proyectada por Antoni Gaudí, comenzó a construirse en 1882. La obra maestra del genial arquitecto catalán está inspirada en las formas de la naturaleza y el interior pretende parecerse a un bosque con un conjunto de columnas inclinadas que recuerdan a los árboles. Vista así, esta basílica, considerada el máximo exponente de la arquitectura modernista catalana, si no fuera por el Cristo en la cruz, podría parecer el reino de la fantasía en la línea de otras obras de Gaudí. Jordi Faulí es el noveno arquitecto que se pone al frente de la dirección para la finalización de las obras que antes de 2020 se habían previsto para 2026. La pandemia del covid obligó a ampliar plazos y cambiar de planes. En 2026, coincidiendo con el centenario de la muerte de su creador, se espera acabar la torre de Jesucristo, concretamente el punto más alto del templo con 172,5 metros de altura -entonces se convertirá en la iglesia más alta del mundo y en el edificio más alto de Barcelona-. Todavía quedarán pendientes la fachada de la Gloria, dos capillas, una sacristía y elementos de las cubiertas.