En marcha hacia un pueblo libre con personas libres
Los participantes en la Gazte Martxa 2015, organizada por los colectivos juveniles Ernai y Aitzina, concluyeron ayer en Berriozar el camino que iniciaron el viernes en Lekunberri, mostrando su voluntad de seguir trabajando para conseguir una Euskal Herria libre formada por personas libres. «Los jóvenes somos la clave para construir el futuro, porque luchamos por el presente, porque transformamos el presente», añadieron en el acto que puso fin a la marcha.
«Queremos construir un pueblo libre. Un pueblo libre formado por personas libres», destacaron ayer en Berriozar Maialen Etxeberria y Alex Feldman, en nombre de los organizadores de Gazte Martxa 2015, los colectivos juveniles Ernai y Aitzina, en el acto político del último día de esta movilización, en la que han participado unos 2.000 jóvenes, según el recuento realizado por los organizadores. El viernes partieron caminando desde Lekunberri para concluir ayer en Berriozar.
«Los jóvenes somos la clave para construir el futuro, porque luchamos por el presente. Porque transformamos el presente», añadieron en un acto que comenzó con un repaso a la historia de Euskal Herria y un recuerdo a los represaliados.
Junto a ello, subrayaron que «la lucha de años nos ha traido hasta aquí» y destacaron que «las modas, las situaciones y los tiempos cambian, pero las bases y los deseos no. Nuestro objetivo es conseguir un pueblo libre, rojo, verde y morado, soberano». «Pero el camino –advirtieron al respecto– no es un mero trámite. Los pasos son tan importantes como el destino. Cada paso que damos aquí y ahora define nuestra vida diaria y nos define a nosotros. La decisión de romper las amarras que nos ha impuesto el sistema es el modo de entender nuestra vida: ilusión, deseo y fuerza, compromiso, sentido crítico... La lucha tiene influencia en nosotros y nosotros influimos en la lucha».
Proclamaron, asimismo, que «esa opción, la que hacemos día a día, es la que convierte a la revolución en imparable. La que hace que el cambio se esté llevando a cabo. Es la que da color a las calles y la que marcan los enemigos del pueblo. Esa opción es la que nos coloca en el punto de mira del enemigo. Es la que nos lleva a sufrir la represión. Y también la que llena de ciudadanos vascos los juzgados: de quienes nos han enseñado que el internacionalismo es la ternura de los pueblos, de quienes se atreven a enarbolar la ikurriña en Nafarroa, de quienes se organizan a favor de una juventud libre o de quienes rompen las fronteras y construyen un pueblo. Ni las amenazas, ni los golpes ni castigos han logrado atemorizar a la juventud».
En este sentido, destacaron la necesidad de seguir trabajando en cada barrio y en cada pueblo, «ya que el mar se forma gota a gota. Cada uno de nosotros forma parte de un todo. El grupo nos hace militantes y los militantes formamos el grupo. Somos colectivo. Unidos somos invencibles» y subrayaron la necesidad de «llevar a los pueblos y barrios la unidad conseguida en este marcha».
Desde el viernes
El viernes por la mañana el tráfico de autobuses era intenso en Lekunberri, según destacó Topatu.info. La primera tarea era recoger las pulseras y organizar todo para comenzar a marchar hacia Latasa, primera meta del camino. “Pertsona askez osatutako herri gorri, berde eta morea eraikiko dugu! (¡Construiremos un pueblo rojo, verde y morado formado por personas libres!)» fue la consigna que se escuchó al comienzo de la marcha.
En Latasa recuperaron fuerzas y continuaron el trayecto hasta llegar a Irurtzun.
En esa etapa, la meteorología fue complaciente con los marchistas, algunos de los cuales agradecieron los rayos de sol cantando y bailando mientras caminaban.
A Irurtzun llegaron hacia las cinco de la tarde. Tocaba organizar el montaje de las tiendas de campaña, tomar una ducha y prepararse para asistir a las actividades que iban a tener lugar por la tarde y por la noche. Así, pudieron asistir a las charlas sobre el proceso constituyente en Euskal Herria, o a las impartidas por las delegaciones internacionales que acudieron a Gazte Martxa, o al taller de ternura. Tras la cena, el grupo Uluka amenizó la noche. Posteriormente, tomaron el escenario los grupos que forman el maratón musical Gazte Oihua. Los bertsos tuvieron su espacio en Bertso Olinpiadak y, sin duda, los mejores momentos se vivieron en el «photocall».
Ayer comenzaron a caminar desde Irurtzun para comer en Añezkar y llegar por la tarde a Berriozar, donde celebraron el acto principal de la Gazte Martxa. Siete jóvenes de Amara que marchaban al final de la comitiva fueron identificados y registrados por la Guardia Civil. Fue el único lunar que no empañó un nuevo éxito organizativo. Además del acto político, en Berriozar contaron con las actuaciones de Skakeitan, Oliba Gorriak, KOP, Raperos de Emaús & Zero Koma Backing Band y Mandoilek, además de la romería que puso fin a la noche.