Zuazo y Zarautz arrancan a la vez

Las vizcaínas pretenden subir un peldaño en su nivel competitivo, mientras el Zarautz solo piensa en poder garantizar la permanencia.

Zuazo y Zarautz comenzaban ayer su pretemporada, tras haberlo hecho el jueves Bera Bera, afrontando el que podría ser un año muy apasionante para ambos clubes. El equipo de Barakaldo ha experimentado cambios importantes en su plantilla, y parte con el objetivo de mejorar el octavo puesto liguero que ha calcado en las tres últimas temporadas, desde que regresó a la División de Honor. Con un año de experiencia en el banquillo, Alberto Muñoz ya posee un conocimiento más exacto del rendimiento que es capaz de ofrecer su plantilla, y también del potencial de todos sus rivales.

La plantilla se ha renovado tras la marcha de jugadoras veteranas como Ahedo, Bonilla, Alvarez, Yáñez y Etxabe, y la creación de un segundo equipo permitirá además que algunas jugadoras que estos años han jugado en Askartza, junto a las que llegan del juvenil, estén más integradas en la estructura del club y a disposición del primer equipo si fuera necesario a lo largo de la temporada.

Una internacional alemana

En el capítulo de altas la llegada de la internacional alemana Laura Steinbach atrae gran parte de la atención. La lateral izquierda de 181 centímetros de estatura, que cumplió 30 años el pasado domingo, ha trasladado su residencia a Gasteiz junto a su pareja, el exjugador Iker Romero, haciendo así posible su fichaje por un club cercano, que acabó siendo Zuazo. Steinbach ha sido internacional con Alemania en más de un centenar de ocasiones, la pasada temporada dejó el FTC Ferencvaros húngaro (que participaba en Champions League, donde juega Nerea Pena) para enrolarse en el Füchse Berlin y preparar su mudanza a Gasteiz, y si compite a su nivel puede conducir a Zuazo a pelear por una plaza europea.

Pero no es el único fichaje significativo. La falta de estabilidad en la portería de las últimas temporadas pretende reconducirse con la llegada de Mercedes Castellanos, con experiencia en la categoría y en la Liga francesa, lo que podría ayudar a apuntalar una posición tan importante, y dar tiempo y cobertura para la progresión de Maddi Aalla, que acaba de realizar un Europeo junior muy notable.

También se incorpora Jessica Nogales, que ya jugó en Barakaldo en la primera experiencia en la elite del club, luego estuvo en Castro y Kukullaga en la máxima categoría, y jugó la última campaña en la División de Honor Plata en Logroño, con el claro objetivo del ascenso, aunque el Zarautz se cruzó en su camino en el momento decisivo. Las zurdas Mujika y Berastain completan las novedades del club.

Zarautz, con un equipo de casa

En Zarautz las expectativas son diferentes, y la permanencia se celebraría como si fuera un segundo ascenso. Un club con larga trayectoria, que ya vivió la experiencia de la División de Honor en la temporada 1983-84, tratará de mantener la categoría con una plantilla casi idéntica a la que subió, con jugadoras sin apenas experiencia en la élite (salvo la lateral Itziar Ubillos, la extremo Naiara Badiola –ambas tras haber pasado por el Cleba León– y la pivote Maite Alcoba, que llegó a alinearse con Bera Bera en la temporada 2007-08).

El equipo responde a la mejor tradición de un club de cantera, con 10 de las 14 integrantes de la plantilla nacidas en Zarautz, junto a otras dos con una larga trayectoria en el club (la oriotarra Granado y la eibartarra Alcoba), y las dos que han llegado para completar el equipo, Ubillos (Andoain) y Kortaberria (Elgoibar). Una plantilla, por cierto, completamente euskaldun, que utilizará el euskara para comunicarse en la pista, un hito en los deportes de equipo de élite.

Las zarauztarras tratarán de suplir su inexperiencia con su enorme ilusión, y la esperanza de que las gradas de Aritzbatalde las ayuden a dar alguna sorpresa. En las cuatro últimas temporadas ha sido necesario sumar entre 12-15 puntos para salvarse, aunque en la última habría sido suficiente con 8. Para lograr ese objetivo sus principales rivales en esta pelea parecen, al menos a priori, el Oviedo y Cleba León, y el calendario sorteado el pasado lunes deparó que fueran precisamente los dos últimos partidos de la temporada para el Aiala Zarautz.