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BALONCESTO

La Liga Femenina más vasca y la más apretada

Aparte de Girona, por ser la vigente campeona, y una Perfumerías Avenida con ganas de revancha,Gernika KESB opta a ser una «outsider» y UPV aseguir dando pasos adelante. Iraurgi busca no sufrir.


La Liga Femenina 2015/16 arranca este fin de semana y se convertirá en una extraña carrera de obstáculos cuya fase Regular acabará el próximo 26 de marzo, con un parón para la Copa entre medias. No en vano 2016 es año olímpico y la selección española –y otras cuantas– quieren adquirir el billete para Río de Janeiro en el correspondiente preolímpico del mes de julio. Así las cosas, las distintas ligas han visto cómo sus calendarios se sumían en un caos de parones y acelerones, y con esos bueyes deberán arar los clubes, los técnicos y las jugadoras.

Por otro lado, la LF 2015/16 es también la más vasca, con tres equipos en la élite. Por un lado, Gernika KESB ya demostró el año pasado que llegaba para quedarse, y a pesar de perder dos puntales como Mosby y Brittany Miller, Mario López ha logrado retener a otras jugadoras esenciales como pudieran ser Claudia Pop o Naiara Díez, mientras que llegaban apuestas como Ariel Edwards, Gisela Vega o Shanasa Sanders.

Para empezar, la escuadra vizcaina revalidaba la Euskal Kopa, superando a IDK Gipuzkoa UPV, y su entrenador, Mario López, asegura que este año su equipo ha de dar «un paso adelante», aunque se escudaba diciendo que el primer objetivo es «la permanencia».

«Las segundas temporadas de los equipos ascendidos siempre suelen ser más complicadas que las primeras y más en una Liga Femenina en la que las plantillas se han reforzado aún más con respecto a la anterior campaña y en la que cada partido se convertirá en un reto de máxima dificultad», declaraba Mario López en una entrevista.

Al mismo tiempo, añadía que «está claro que sin ese referente —en referencia a Mosby— la anotación de esta temporada estará más repartida. Pero confío en la adaptación de las nuevas y en que mis jugadoras den un paso adelante. Mantendremos nuestro estilo basado en la intensidad, en la buena defensa y en ataque cambiaremos concepto. Intentaremos que nuestra pista siga siendo un fortín y afrontaremos la temporada con la mentalidad adecuada para gestionar bien las derrotas para, desde esa fuerza del grupo, ser lo más competitivos posibles».

Spar Unigirona es la vigente campeona, un conjunto que dio la campanada en los pasados play offs al eliminar al favorito, un Perfumerías Avenida totalmente reconvertido. Silvia Domínguez regresa de Ekaterimburgo a volver a hacer de las charras un conjunto campeón; se trae a Astou Ndour de Turquía, Vanessa Gidden, «robada» al Girona o Gabriela Morginean. Cierto que también ha perdido a Anna Montañana y Marta Fernández –retiradas–; Marta Xargay, Rezan y Robinson.

Mientras, Girona trata de hacer malabares para hacer un equipo competitivo en la competición doméstica y la Euroliga. El miércoles volvía a ganar a Perfumerías, al llevarse la Supercopa por 61-59, con MVP para Chelsea Gray. Sin el gasteiztarra Roberto Iñiguez en el banquillo, la base Jordana deberá poner orden a las Pikciute, Carbó y compañía, y buscar la química que las llevó al título.

Cadí La Seu, con Abalde, Laura Gil, Tania Pérez y Belén Arrojo, opta a ser un candidato de segunda fila, un equipo que ya el año pasado compitió antes de que se les agotaran las fuerzas en semifinales, uno de los equipos más jóvenes de la Liga Femenina. Junto con el Mann Filter de Víctor Lapeña, Gaby Ocete, Nogaye Lo y Brittany Miller, y el Bembibre de Vega Gimeno y Laura Herrera, serán los equipos que competirán con Gernika en la parte alta.

Doblete guipuzcoano

IDK Gipuzkoa UPV e Iraurgi son lo nunca visto: dos equipos guipuzcoanos en la élite femenina. Una gran noticia, que llega de aquella manera.

Las de Azu Muguruza –elegida mejor entrenadora de la pasada campaña– esperan «tener menos problemas que el año pasado», según la propia Muguruza. Tras sufrir a cuenta de un calvario de lesiones y desaciertos en fichajes, a su trío mágico –Novo, Sarr y Forasté– le ha llegado una pívot «culona» y con buena mano: Cierra Bravard. Ideal para tener mayor rotación y más opciones. Y más si Laura Arroyo o la joven Maria Eraunzetamurgil siguen su ansiada progresión.

Lo del Iraurgi es otra cosa. Los fichajes de Davydova y Markovic refuerzan el interior y la venezolana Roselis Silva trae dirección y puntos. Las de Joseba Lizarralde, con una plantilla centrada en jugadoras de casa que, eso sí, en categorías inferiores no envidian a nadie, parecen las candidatas perfectas al descenso. ¿Pero y si se demuestran que tiene calidad para competir en la Liga Femenina?

El «forzado» ascenso de Iraurgi a la Liga Femenina

El Iraurgi Saskibaloi Taldea celebraba en verano el ascenso de sus primeros equipos a la Liga Femenina 2 y a la LEB Plata. En cambio, en una nueva filigrana de la Federación Española de Baloncesto –FEB– y su «método» de gestión, el club azpeitiarra se ha encontrado en la «obligación» de ascender a la Liga Femenina, ocupando el lugar vacante dejado por Al-Qázeres.

Lo nunca visto pero cierto. «Estamos fuera de sitio, en una categoría que no nos corresponde», reconocía el gerente del club José Luis Zubizarreta «Xubi», que explicaba la carambola en base a cierta falta de paciencia de la federación. «Estábamos en la tesitura de haber logrado el ascenso a la LF2, y el 3 de julio, el momento en el que teníamos que presentar los avales, por tener que pedir dos, a cuenta del equipo de LEB Plata, se nos retrasaba de la fecha establecida, el 3 de julio. Enviamos un escrito –a la FEB–, anunciando que los avales están tramitándose y que los íbamos a tener la semana siguiente, y a los tres días realizamos el ingreso correspondiente al aval. Pero –la FEB– nos saca de la categoría, al haber cinco equipos que solicitaban participar en esa Liga, pese a no habérselo ganado a nivel deportivo. No nos da ningún margen para recomponer el tema y nos sitúa en el puesto 29 de los equipos de esa competición», explicaba.

«La LF2 se divide en dos grupos de 14 equipos. Entonces, cuando Al-Qázeres, que en principio opta a jugar la Liga Femenina, decide no hacerlo y juega en la LF2. Entonces, la junta directiva nos planteamos que, ya que no nos dejan jugar en LF2 y no podemos competir en ninguna otra categoría inferior, nuestra única posibilidad de competir es adquiriendo la plaza que ha dejado vacante Al-Qázeres en la Liga Femenina», añadía Zubizarreta.

En estas, desde las filas del Iraurgi saben dónde se han metido, y a falta de otra cosa, les queda la ilusión de poder competir con un grupo mayoritariamente compuesto por jugadoras locales. «De entrada, esto lo cogemos con susto, con miedo, pero con ilusión. Esto es como una bomba que nos puede explotar en las manos o puede explotar y salir bien», narraba Zubizarreta.

«Lo que nos dolió fue no darnos margen ninguno para inscribirnos en LF2, cuando no tenemos un euro de deuda», se quejaba. «A partir de ahí, el primer partido es ante Gran Canaria; vendrá Girona, Perfumerías... Cada canasta será una celebración». A.G.