En los Juegos Olímpicos de Tokyo 2020 se ha seleccionado la escalada deportiva como posible deporte adicional en el programa de eventos y ya están los escaladores de dificultad con los dientes afilados ante la futura inclusión de este deporte en el muestrario olímpico. Aunque tienen una pega: parece ser que se considera una modalidad mixta en la que los escaladores tendrían que competir en cuerda, en boulder y en velocidad, esto es, como hacer competir al mejor atleta de 3. 000 metros contra un Usain Bolt en los 100 metros y viceversa. Bueno, ahí está el tema… al fin y al cabo los atletas de decathlon hacen algo parecido. En el otro extremo, un guía de montaña francés ha sido declarado culpable de homicidio involuntario. En 2008, Jean Pierre Olivier, con sus cinco clientes, fue sorprendido por una avalancha en el macizo alpino italiano del Gran Paradiso. Resultado: sus cinco clientes muertos y él como único superviviente, aunque bastante maltrecho. Como consecuencia, 18 meses de prisión condicional e indemnización a las familias de las víctimas con 450.000 €. Según se dice, el riesgo anunciado de avalancha era de 4 sobre 5, altísimo para los estándares de montaña. Imprudencia temeraria es la acusación. Y entre estas dos noticias de montaña caben todo tipo de sucesos, historias de amor y masacre, toda la complejidad de la vida misma.