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Laso con la alarma sonando; se quema el técnico del CAI

Bilbao Basket recibe a un Real Madrid contra las cuerdas en la Euroliga, y conPablo Laso cuestionado. Saski Baskonia visita Zaragoza, en el primer dueloque dirigirá Andreu Casadevall. Ponsarnau sigue sin problemas, por ahora.


El desempeño del entrenador es muy desagradecido. Olvidados en los éxitos y señalados en las derrotas, su último partido suele ser el único aval. Así las cosas, da igual que Pablo Laso guiara al Real Madrid a un triplete histórico la pasada campaña, porque en su visita a Miribilla está con poco margen de error, y quién sabe si una derrota madridista precipitaría su caída. Una caída como la de Joaquín Ruiz Lorente en el CAI, destituido tras un balance de 1-6 de los maños y sustituido por Andreu Casadevall, que prepara su primer partido ante Laboral Kutxa.

Los «idus de noviembre» no solo se cobran peaje en Gasteiz. A pesar de realizar una aceptable campaña 2014/15, Joaquín Ruiz Lorente, que debió cargar con el peso de entrenar al CAI Zaragoza en el proceso de enfermedad y muerte de José Luis Abós, no pudo sobrellevar un errático inicio de temporada. Si en la Eurocup la escuadra maña mantiene una aceptable segunda plaza en el grupo C, con un balance de 4-3, el 1-6 de la ACB no lo ha podido levantar.

Tras caer por 91-79 ante el Gran Canaria se ponía punto final a diez años en el seno del cuadro aragonés y ahora será Andreu Casadevall quien, a partir de las 13.00, deberá intentar enderezar el rumbo liguero del CAI. Amén de los resultados, el no saber hallar recambios efectivos para Tomás Bellas como base suplente o los excesos de cara al aro de Jelovac han sido las grandes cruces de un Ruiz Lorente que se marchaba dando gracias a la misma afición que siempre lo tuvo bajo la alargada sombra de José Luis Abós.

«Ellos tienen malas sensaciones y un entrenador nuevo, por lo que serán muy peligrosos», advertía el baskonista Adam Hanga sobre su rival. «Además, nosotros hemos perdido los tres últimos partidos fuera de casa y queremos romper esa racha», añadía el alero húngaro.

Más de 90 puntos por partido

La ausencia de un jugador como Marcus Slaughter la está notando más de la cuenta el Real Madrid. Pese a contar con gente como Ayón o Thompkins, o el incombustible Felipe Reyes, lo cierto es que la defensa madridista hace aguas.

En la Liga ACB va con 6-1, «y siempre ha ganado tras una derrota en Euroliga», advertía Sito Alonso. Pero lo cierto es que en la Euroliga cede más de 90 puntos de media. El Partizan le metió 94 y ello ha empujado al cuadro merengue a la última plaza del grupo A, y ha aumentado sobremanera la tensión en el seno madridista. Una tensión que los hombres de negro deben explotar a las 19.00 en Miribilla. La verticalidad de Hannah o Bertans podrá quebrar la frágil retaguardia blanca.

Por su parte, Gipuzkoa Basket recibe al Baloncesto Sevilla a las 18.00. El balance de 0-7 no pone en peligro a Jaume Ponsarnau; sí, no obstante, las sensaciones del equipo. Nachbar y Bamforth, en cambio, han encauzado la andadura hispalense. Como Ponsarnau no halle la forma de pararlos, incluso su banquillo pudiera quemarse.

Germán Gabriel apunta a GBC

El «Diario Sur» de Málaga apuntaba a que Germán Gabriel abandonará de forma inminente Unicaja. El ex de Bilbao Basket se ha encontrado a la cola de una rotación larguísima, y solo ha jugado una media inferior a los 10 minutos tanto en la Liga ACB –7,8– como en la Euroliga –4,5–.

Uno de los posibles destinos del malagueño nacido en Caracas pudiera ser precisamente Donostia. Anteriormente, Gabriel habría rechazado la oferta de Gipuzkoa Basket y Andorra para quedarse en su casa. De hecho, Gabriel firmaba con Unicaja por dos temporadas, pero su marginal rol ha pesado demasiado en este jugador tan sobrado de clase como falto de físico para un equipo como el andaluz.

La llegada de Gabriel supondría un gran activo para el juego interior, pero a día de hoy solo es especulación. Así, el director general de Gipuzkoa Basket, Germán Cea, declaraba durante la semana que «la solución a nuestra situación está en las manos de nuestra plantilla actual». A. G.