GARA Euskal Herriko egunkaria
MANIFESTACIONES DE SARE Y BAGOAZ

... y Baiona añade emoción y color


Baiona se unió por primera vez a la marcha multitudinaria anual a favor de los presos y exiliados vascos reuniendo así a numerosos habitantes de Ipar Euskal Herria y ciudadanos venidos especialmente de Gipuzkoa y Nafarroa Garaia. La salida de Lauga y la llegada a las orillas del Errobi fueron los momentos más emotivos de la marcha de tres kilómetros que reunió a 8.000 personas.

La grave situación de Lorentxa Guimon, encarcelada en la prisión de Renne,s fue una de las protagonistas de la protesta de ayer. Tras la banderola principal, una específica rezaba en francés: «SOS Lorentxa Guimon. Liberad a los prisioneros enfermos».

Las reivindicaciones a favor de los derechos de los presos se oyeron sobre todo al comienzo de la manifestación, es decir, a su paso por el centro de la capital labortana, y recobraron fuerza en la última parte del trayecto.

Políticos, electos y miembros de diferentes movimientos sociales y sindicales hicieron suyas dichas demandas con su presencia. Así, las parlamentarias socialistas Frédérique Espagnac, Sylviane Alaux y Colette Capdevielle participaron en la marcha de ayer. Esta última, tras recordar la Conferencia Humanitaria por la Paz que tuvo lugar en París en junio pasado, subrayó que la de ayer no solo es una reivindicación ciudadana, sino asumida también por gran parte de profesionales y representantes de diferentes ámbitos políticos y sociales.

Citas necesarias

La consejera regional de Los Verdes-Europe Ecologie, Alice Leiciagueçahar, afirmó que son necesarias citas como la de ayer para recordar que la sociedad vasca sigue movilizada: «No les vamos a dejar que sigan sin hacer nada». Entre los consejeros departamentales se encontraban también el abertzale Alain Iriart y la socialista Marie-Christine Aragon.

Los alcaldes de Hendaia, Kotte Ecenarro; de Biarritz, Michel Veunac; de Arberatze, Sauveur Bacho; de Uztaritze, Bruno Carrère; de Izura, Daniel Olzomendi; y de Baiona, Jean-René Etchegaray, fueron algunos de los primeros ediles presentes en el acto. «Los gobiernos español y francés están inertes, hacen como si no vieran, o no quisieran ver, lo que ha sucedido desde hace cuatro años y medio» remarcó este último.

Por su parte, Lucien Betbeder, alcalde de Lekorne y presidente del Biltzar, declaró que participó en la marcha en condición de persona y también de electo para apoyar el proceso de resolución y recordó que «estamos en vísperas de la creación de la mancomunidad única y es necesario tratar los temas del acercamiento y la amnistía y tambíen encontrar una salida a esta situación». En ese sentido, apeló al Estado francés a respetar sus leyes.

En el bloque de representantes políticos y sociales estaban también los miembros de Sortu Rufi Etxeberria, Xabi Larralde o Maite Ubiria y los de AB Peio Etxeberri-Aintxart y Jakes Borthayrou, que denunció el bloqueo de los estados y aseguró, tras mencionar lo acordado en la Conferencia de Aiete, que «para que el proceso avance es necesario solucionar la cuestión de los presos».

Junto a ellos marchaban también numerosos electos municipales, entre ellos la concejala comunista de Donibane Lohizune Yvette Debarbieux y el abertzale de Baiona Jean-Claude Iriart, que explicó así su presencia: «Hay que reforzar el proceso de paz y apoyarlo hasta que se consiga».

Asimismo, estuvo presente el portavoz estatal de NPA, Philippe Poutou, que hizo declaraciones contundentes. «Mi presencia en esta manifestación es para mostrar mi solidaridad al pueblo vasco y a sus presos y para que el Estado cambie su postura sobre el acercamiento». Añadió que está en «completo desacuerdo con la indivisibilidad del Estado» y que reconoce el derecho del pueblo vasco a decidir, incluida su independencia.

Desde el ámbito sindical acudieron Michel Larralde, secretario general del sindicato CFDT del País Vasco, o Jean-Louis Dupin, responsable de la CGT-Salud y Acción social. El miembro de LAB y presidente del Consejo de Prud’Hommes (tribunal de asuntos laborales), Jerónimo Prieto, habló sobre la situación de los presos y recordó en particular la difícil situación de Lorentxa Guimon: «El Estado debería de aplicar su propia ley y liberarla».

La presidenta del Consejo de Desarrollo, Caroline Phillips, también afirmó que «el proceso de paz tiene que avanzar y encontrar el camino para que Euskal Herria se desarrolle».

Varios miembros del movimiento civil Bake Bidea, como Christophe Desprez o su presidenta Anaiz Funosas, así como representantes del Colectivo de Exiliados y de Presos Políticos Vascos, no faltaron a la cita.

Hablando al corazón

Tanto las declaraciones de electos, sindicalistas o miembros de movimientos sociales como el mensaje final coincidieron en interpelar a ambos estados para que aborden la resolución al tiempo que apelaban a la sociedad vasca a seguir trabajando en favor de la paz.

Sin embargo, hubo momentos especiales en los que los manifestantes sintieron más de cerca y con más fuerza la razón que los llevaba a manifestarse ayer por las calles baionarras. En concreto, el de la salida de los familiares, con sus característicos quinqués y banderolas de «Euskal preso eta iheslariak etxera». A su paso fueron recibidos con sentidos aplausos que resonaron en la rotonda de Lauga.

También llegaron al corazón los mensajes transmitidos por los bertsolaris en Bilbo y en el escenario labortano. Desde la capital vizcaina se oyeron en Baiona los bertsos de Julio Soto y los de Aiala Martin, que constataban que lo que había movilizado a los presentes era la certeza que con cariño y esfuerzo se pueden «mover las piedras».

Amets Arzallus, junto al Errobi, instó a la sociedad a «derribar el muro tirando desde los dos lados». Aunque fueron las palabras de su hermana Maialen las que más directamente llegaron al corazón de los manifestantes: «Tenemos un arma entre las manos, el amor del pueblo». Sus palabras recibieron la mayor ovación.

La jornada de ayer estuvo marcada en Baiona por la manifestación desde por la mañana, e incluso fuera de la ciudad, en las carreteras de llegada a Lapurdi, donde se produjeron retenciones de varios kilómetros en momentos puntuales.

Antes de su comienzo se dio a conocer que se habían sumado nuevos electos a la ya extensa lista de más de 200 cargos que apoyaban la protesta, entre ellos el alcalde de Banka, Michel Oçafrain; el de Uharte-Garazi, Jean San Pedro; y Beñat Arrabit, de Arrosa y presidente de la mancomunidad Garazi-Baigorri.

Desde el mediodía, la explanada Roland-Barthes mostró un gran ambiente que también continuó tras la manifestación gracias a la actuaciones de los Xiberoots, 2Zio eta Joseba B. Lenoir Gang.