Dinamarca reacciona tras el descanso y Alemania gana en un reñido envite
La férrea defensa escandinava ahogó a una España que lo había hecho bien en el primer tiempo. Ante un Hansen poco protagonista, Landin, Noddesbo y Damgaard se encargaron de llevar en volandas a Dinamarca.
Dinamarca se agarró a su férrea defensa para reaccionar en la segunda parte ante una España que lo había hecho bien en la primera, pero a la que anuló en ataque tras el descanso. Un parcial de 0-7 a favor de los escandinavos –solo cuatro goles de los de Cadenas en 19 minutos– les permitió firmar el revolcón.
En un día en el que Mikkel Hansen no estuvo precisamente inspirado, tuvo que ser Landin en la portería, Noddesbo desde los seis metros y Damgaard con certeros lanzamientos lejanos quienes sostuvieran a una Dinamarca que supo sufrir durante la mitad del envite y apretar su 6:0 para asfixiar la conexión con Julen Aginagalde, que no fue el de otros encuentros. Sin darse por vencidos en ningún momento, los de Gudmundur Gudmundsson vieron acrecentar sus opciones cuando a falta de un cuarto de hora para el final consiguieron ponerse por primera vez por delante en la contienda (18-19), mientras España sufría un atasco total en el apartado ofensivo.
Ni siquiera Arpad Sterbik, que estuvo magistral en la primera media hora con paradas increíbles, pudo ya contener la avalancha danesa, que iba directa a por una victoria muy importante, con sabor a revancha incluído. Solo el poco utilizado Juan del Arco, y ya cuando la derrota se veía inapelable, sostuvo en parte a los hispanos en ataque, pero sin impedir que la diferencia de goles fuese superior a tres, algo que puede ser muy importante, si hay un triple empate con Alemania en la cabeza.
Los teutones siguen a lo suyo
Y es que los germanos siguen dando muestras de un extraordinario coraje para superar sus importantes ausencias, aunque ayer tuvieron que sufrir lo suyo ante una Rusia que vendió cara su piel y que empezó con muy buen pie el duelo frente a los teutones, pero que acabó perdiendo gas en los momentos decisivos del partido.
La igualdad entre ambas escuadras se plasmó hasta el final del encuentro –un 28-27 del lado alemán a falta de seis minutos dio fe de ello–, pero los goles de Reichmann y Weinhold pusieron un 30-27 casi inalcanzable, pese a las dianas de Zhitnikov y Atman por enjugarlo.