16 SET. 2016 Europa League ¿A setas o a Rolex?... A nada Los rojiblancos salen escaldados cuando menos lo esperaban en un encuentro en el que contemporizaron demasiado hasta que se vieron sorprendidos por un Sassuolo que aprovechó sus graves errores defensivos. Joseba VIVANCO SASSUOLO 3 ATHLETIC 0 El conocido chiste de bilbainos le viene que ni al pelo a este Athletic de inicio de temporada para resumir de una manera gráfica a lo que viajó a tierras italianas. Porque si no, no se entiende. En una primera parte desangelada de fútbol tanto como las gradas del estadio, los hombres de Ernesto Valverde, ante un rival que no era quintaesencia de nada, tuvieron más respeto a encajar que ambición por hacerlo ellos. Lo malo, lo que nadie podía imaginar, es que en ese ni ir a por setas ni a por Rolex, terminó por llevarse un saco de goles, tres, que pudo ser alguno más. Lo único que puede explicar esa indefinición de miras a la hora de medirse a un rival al que se pudo apretar más en esos primeros cuarenta y cinco minutos y no se hizo, es que son sabedores de que a día de hoy no están ni cerca del nivel de lo que se supone es su juego. Es una evidencia que hay puntales del equipo que están alejados de su mejor prestación, la frescura del fútbol combinativo y de posesión se ha sustituido por el del balón largo desde la defensa, y los problemas de generación de ocasiones empiezan a ser muy alarmantes. Así que visto lo visto ahora mismo, como puso el práctica en A Coruña y repitió ayer, especialmente, es esa primera parte, la máxima de los leones es la de no perder balones en la medular que puedan hacerle un siete a una defensa. El problema es qué hacer a partir de ahí, porque la flauta no va a sonar siempre. Reggio Emillia, la ciudad a la que se desplaza el Sassuolo para sus partidos, en un laberinto de plazas y callejones, de soportales y rincones, que siempre conducen a Piazza Camillo Prampolini. El Athletic en su estreno continental se metió él solito en un laberinto del que para cuando se dio cuenta el Sassuolo ya le había indicado la salida. Pero con un 3-0 pintado a la espalda. Es el riesgo que se corre cuando decides no arriesgar y eso termina siendo lo más arriesgado. Y es que Athletic y Sassuolo firmaron una primera mitad blandita –apenas duelos individuales ni faltas– en la que los rojiblancos, sin alardes, fueron más que los locales. Con un once en que la novedad fue la incrustación de Yeray –uno de los mejores ayer por su seguridad y temple– en el eje de la zaga y la inclusión de Sabin Merino en lugar de Aduriz en punta. Los leones empujaron de salida, el debutante la tuvo en una cabezazo a saque de córner de Beñat pero se le fue cruzada, el capitán Muniain –que volvía a dejar a Susaeta en el banquillo– se mostraba participativo, De Marcos lo intentaba de volea, el de Igorre ayudaba a la salida de balón desde la defensa, el veterano Cannavaro era un chollo para los balones largos a Sabin Merino, el Athletic ponía en práctica un juego directo, evitando pérdidas de balón que conceder a los velones puntas italianos... Los de Ernesto Valverde cimentaban lo que aventuraba quizá un buen resultado final. A Muniain le faltaban unos centímetros para conectar bien un cabezazo, el Sassuolo apenas si daba señales de vida arriba, pero al Athletic le faltaba una marcha más, esa que quiso imprimir Beñat con un peligroso disparo lejano y un casi gol olímpico poco antes de tomar rumbo a vestuarios. Fallos son goles La impresión al descanso era que los bilbainos habían desaprovechado la ocasión de haberse ido por delante en el marcador con solo haber dado un paso adelante, pero en lugar de eso, ni Raúl García ni Williams habían hecho acto de presencia, a Muniain se le había ido el gas como a un Lambrusco típico de esta región, Sabin otro tanto... En el segundo tiempo, ambos actores estaban obligados a hacer algo más de lo que había demostrado y así el hábil Politano avisó en una jugada individual cuyo chut se fue cruzado, pero aviso de lo que estaba por venir. El gol del joven lateral catalán Lirola, cedido por la Juventus, que se fue con una facilidad pasmosa de Sabin y Beñat en el medio campo, encaró y ridiculizó la falta de contundencia de Laporte y salvó a Iago con sutileza. Comenzaba la verbena defensiva de los rojiblancos. Con Aduriz y Susaeta ya sobre el césped antes incluso del gol, por unos indolentes Muniain y Williams, el Athletic trató de responder pero ni supo ni pudo, hasta que en un balón en largo del portero local, San José acabó regalando al francés Dutrel una cesión atrás para que hiciera el segundo. El tercero, otro desatino defensivo, fue la estocada para un equipo que ya había besado la lona y al que se le debieron de aparecer los mismos fantasmas que en Gijón, cuando la ficción que se habían hecho en sus cabezas no tuvo nada que ver con la cruda realidad. Iago salvó el cuarto en una gran parada, lo que ya hubiera sido sangrante. Al final, el Athletic se viene de vacío y empieza su andadura en la Europa League con el peor pie posible. Las sensaciones que transmite del equipo siguen sin ser buenas, como si tratara de superar estas dudas en su juego de la mejor manera posible a la espera de recuperar el nivel esperado. Hay hombres por debajo de su potencial, el juego no fluye, pero mejor clamar al cielo, tragar saliva y dejar para otra ocasión sesudas tesis. «Si a alguien le dicen que acabaríamos 3-0, no lo cree» «Empiezo yo», se adelantó Ernesto Valverde en sala de prensa antes de que nadie le preguntara por su valoración del partido. Una análisis en el que reconoció la dureza del resultado, pero que mitigó con la defensa de que su equipo tenía controlado el choque hasta que los goles les sorprendieron. «El partido ha sido bastante disputado, controlado por nuestra parte en el primer tiempo. En el segundo manteníamos el control, llegábamos pero sin crear peligro, se veía que podíamos llegar o hacer el gol, con más dominio nuestro, pero ha venido ese gol, nuestra reacción ha sido buena, hemos intentado el empate, podíamos hacerlo, pero esa jugada desgraciada del segundo la hemos acusado. Obligaba a la desesparada, pero ha llegado el tercero», describió el encuentro. Sí asumió que «el resultado es duro, contundente», pero «mucho más de que lo refleja el partido, creo. Pero es así, nos quedan cinco partidos y miramos hacia adelante. Nos tenemos que levantar de este golpe que es duro», concluyó. A juicio del técnico rojiblanco, «si a alguien le dicen que el partido iba a acabar 3-0 no se lo cree, porque el dominio era nuestro». Sí que se lamentó mucho de la falta de ocasiones, al reconocer que «inviertes mucho para recoger poco, tenemos que mejorar en eso, en traducir en ocasiones de gol lo que hacemos, y también protegernos atrás». Txingurri reconoció que «no estamos consiguiendo buenos resultados, pero lo ponemos todo en perspectiva, no nos desviamos de lo que son los partidos, hemos perdido pero no hemos estado tan lejos de la victoria, incluso hoy. Hay que corregir cosas pero ponerlo todo en el momento en el que estamos, venimos de ganar y tenemos partido el domingo, queremo seguir con esa racha en liga, porque el cuento cambia muy rápido. Seguimos con la intencion de pasar a la siguiente fase». Respecto a nombres propios, sobre la ausencia inicial de Aduriz respondió que «lo ha decidido el entrenador, tenemos luego otro partido». Respecto a la de Etxeita como descarte, «porque no tengo capacidad para convocar a más de 19 jugadores. Tenía a Boveda, a Lekue que puede jugar ahí, he decidido descartar un defensa y ha sido él, pero le podía haber tocado a cualquiera». Y con el único que se atrevió fue con el partido de Yeray, «ha estado muy bien, a gran nivel, no sé si el mejor de la defensa, pero no me ha sorprendido como ha jugado porque le veo bien como entrena». Por último, se refirió a sus palabras del día anterior sobre su no participación en la decisión de que la prensa no viaje junto al equipo. «Quiero dejar claro que no me voy a desdecir, pero yo siempre asumo las decisiones del club como si fueran mías. Estamos en el mismo barco».J.V. Yeray es el 603 jugador que viste de rojiblanco Yeray Álvarez debutó con la camiseta del Athletic, convirtiéndose en el jugador 603 en la historia del club rojiblanco. «Siento una alegría enorme, no me he complicado. No es el debut soñado, pero estoy contento de que haya llegado este momento». Fue el hombre del día. San José admite que su error «fue muy grande» «Lo teníamos controlado y nadie se lo esperaba. El primer gol es un palo, queríamos ir arriba pero el segundo, otro error, por mi parte muy grande, e intentar que no vuelva a suceder, nos ha hecho venirnos abajo. No hemos tenido profundidad ni ocasiones y todo unido...», se lamentaba Mikel San José. EL RAPID GANAEn el otro partido del grupo, el Rapid de Viena ganó 3-2 al Genk belga, con remontada incluida. Será el próximo rival del Athletic en San Mamés el 29 de setiembre. La victoria se antoja vital.