GARA
berlín

Ankara acusa a Berlín de «fascista» pese al intento de rebajar la tensión

A la vez que el ministro turco de Justicia, Bekir Bozdag, acusó a Berlín de mantener una actitud «fascista» por prohibir dos mítines para los ciudadanos turcos en Alemania, el primer ministro, Binali Yildrim, y la canciller, Angela Merkel, intentaron rebajar la tensión.

El primer ministro turco, Binali Yildirim, y la canciller alemana, Angela Merkel, mantuvieron ayer una conversación telefónica durante una hora marcada por la decisión de las autoridades alemanas de prohibir los actos políticos durante la campaña para la reforma de la Constitución turca que ampliará los poderes del presidente, Recep Tayyip Erdogan.

Tras un acto de campaña en la provincia de Kirsehir a favor del 'Sí' en el referéndum, Yildirim afirmó que la llamada fue productiva y «algo más larga de lo previsto». «Vamos a intentar un planteamiento diferente. La semana que viene se reunirán los ministros de Asuntos Exteriores de los dos países para aclarar esta cuestión», añadió.

La semana pasada dos municipios alemanes y la ciudad neerlandesa de Rotterdam prohibieron actos de campaña a favor del «Sí« dirigidos a la comunidad turca y desencadenaron una crisis diplomática. En Alemania viven más de un millón de turcos con derecho a voto.

Berlín defiende la prohibición por motivos de seguridad. Igualmente, el primer ministro de Países Bajos, Mark Rutte, argumentó que su país no puede ser un lugar donde se celebren actos de campaña de otros países.. Pese a la llamada telefónica, el Gobierno turco persistió en sus acusaciones. El ministro de Justicia, Bekir Bozdag, que tenía iba a intervenir en uno de los actos en la ciudad alemana de Gaggenau, afirmó que «esta manera de proceder contra nosotros es una forma de proceder fascista y daña los principios democráticos. Supone pisotear la Constitución alemana y la declaración de los Derechos Humanos, de la que Alemania es parte».

Mevlüt Çavusoglu, ministro turco de Exteriores, incluyó en sus críticas al Gobierno neerlandés, «Ninguno de vosotros puede frenarnos. Podemos ir a donde queramos, podemos encontrarnos con nuestros ciudadanos y celebrar nuestros mítines». «¿Dónde está la democracia, dónde las libertades, la libertad de expresión? Nos dais lecciones, pero ¿dónde está el derecho de reunión? ¿Es así cómo entendéis la libertad?», preguntó Çavusoglu.