Ducournau, sangrienta novata del año

L a joven Justine, vegetariana casi de religión, acaba de ingresar en la facultad de veterinaria, y como a todos los demás alumnos, le va a tocar pasar por el rito de iniciación de las novatadas. En una de ellas, y vista la presión social a la que es sometida, va a tener que replantearse muy seriamente todos sus hábitos alimentarios. Así, con estas pocas pistas, se vendía en la Semana de la Crítica del Festival de Cannes, la ópera prima de Julia Ducournau. Tras su primer pase, empezó a correr la voz, y la película se convirtió rápidamente en una de las grandes sensaciones del certamen.

Unos meses después, esta se volvería a mostrar en el Festival de Toronto, donde la organización se vería obligada a poner ambulancias en la salida de la sala de cine, debido a los repetidos episodios de desmayos registrados durante las proyecciones. Pocas semanas después, el público de Sitges opinaría que lo de Canadá era una exageración... pero confirmaría a dicho film como uno de los títulos de terror más imprescindibles de la temporada. Y así es. Con o sin ambulancias, quedan advertidos los estómagos más sensibles... así como los paladares cinéfilos más sibaritas.