Aspe dio ayer a conocer que ha llegado a un acuerdo con Julen Retegi para la renovación de su contrato por año y medio, es decir, que el delantero de Eratsun seguirá vinculado a la promotora de Eibar hasta el 31 de diciembre de 2018. De este manera, a la espera de lo que suceda con Martínez de Irujo y Zubieta, Julen Retegi, con 32 años, será el pelotari más veterano de Aspe en activo una vez que Barriola abandone la práctica profesional de la pelota el 7 de mayo.

El proceso de renovación ha pasado por diferentes etapas. Hace unos dos meses, tras el primer contacto, el pelotari se mostró pesimista en torno a su nuevo contrato a pesar de estar atravesando por un buen momento de juego. La lesión en el hombro que se produjo en el Beotibar el 6 de marzo, poniendo en solfa su presencia en el Manomanista, tampoco parecía ayudar, pero las negociaciones han llegado a buen puerto y el pelotari podrá seguir ejerciendo su profesión.

De esta renovación también se entiende que su recuperación es ya prácticamente un hecho y, si no hay sobresaltos, Aspe cuenta con él de cara al Manomanista. Irribarria, Altuna III, Ezkurdia, Rezusta, Mendizabal III –campeón del Promoción– y Jaunarena completan la nómina de los siete fijos y la octava plaza podría estar entre Elezkano II y Zabaleta, compañeros en el último Parejas.

Final del Promoción en Tolosa

Con la vertiginosa reconversión que se ha dado en las plantillas de Aspe y Asegarce, el campeonato de Parejas de Promoción ha hecho, por fin, honor a su nombre y Asier Arteaga, con 20 años y poco más de un año como profesional, será el «veterano» del cuarteto que aspira a las txapelas de este trampolín.

Además, con un estado de forma envidiable y un balance de 12 victorias en los 14 últimos partidos disputados, el delantero lasartearra, en el mejor momento de su carrera profesional, se presenta como el factor desequilibrante de un duelo en el que los pronósticos está claramente volcados con la pareja guipuzcoana.

Atrás Jon Erasun no tiene quizá la pegada que se estila en los zagueros de nuevo cuño, pero es toda una garantía, mientras que Salaverri es una incógnita tras haber suspendido varios partidos por mal de manos. Peña II, que juega en casa, deberá tomar riesgos en ataque.