Sergio Samitier arrebata el liderato a Gonzalo Serrano
El aragonés se impuso en la Santikutz Klasika y aventaja en 33 puntos al madrileño en la Copa de España.
Sergio Samitier (Barbastro, 1995) dio la victoria al Lizarte ayer en la Santikutz Klasika y, además de confirmar su maillot amarillo como primer sub’23, arrebató el primer puesto absoluto a Gonzalo Serrano (Caja Rural). Le aventaja en 33 puntos con dos carreras por disputar.
Tras bajar del podio con el maillot amarillo, el oscense trasmitía a GARA que «ha sido una carrera muy dura con el cambio de recorrido. Se ha ido una fuga de salida, el equipo ha empezado a tirar y algunos rivales lo han puesto muy difícil. El Caja Rural ha apretado mucho bajando los puertos y en Deskarga se ha decidido todo. He visto que Serrano iba un poco más flojo, que se quedaba y que tenía que aprovecharlo, y he arrancado para coger a un grupo de quince que iba por delante y Jaime Castrillo se ha puesto a tope a prepararme el sprint y la victoria es mía, pero también de todo el equipo. Han trabajado mucho».
Lizarte le ayudó a superar un momento crítico tras el repecho de Kirtenberg, en el que se quedó descolgado y por delante marchaba un grupo de 20 corredores, con seis Caja Rural: «He entrado al repecho que han puesto este año, durísimo, un poco cortado y ahí no se puede progresar. Por suerte luego bajando hemos conseguido contactar porque se ha quedado Antonio Soto a esperarme. Si no, todavía estoy coronando Deskarga. Por eso destaco que el triunfo es de todo el equipo, que me ha ayudado muchisimo».
También disputará Bidasoa
El liderato en la Copa de España se lo jugará en los dos próximos domingos con la Vuelta a Bidasoa entre medias, pero Samitier no va a priorizar la Copa de España a costa de la mejor vuelta sub’23: «No se puede dejar pasar una carrera como la de Bidasoa, que es preciosa. Pienso disputar todas las carreras. Correré el domingo, luego las cuatro etapas de Bidasoa y el día siguiente a Madrid. A ver si consigo asegurar antes de esta última carrera del Macario el triunfo sub’23 y si tengo la suerte de estar mano a mano con Serrano».
Parecía que el madrileño tenía muy encauzada la Copa tras ganas las dos primeras carreras, y Samitier al inicio «pensaba trabajar día a día y centrarme en asegurar el liderato sub23. He tenido la suerte de que he conseguido ganar y ponerme líder, pero quedan dos carreras y estoy seguro de que me lo pondrá Serrano muy difícil». Su liderato demuestra su regularidad en todos los terrenos y señala que «hay que ser completo en amateur porque luego pasas a profesionales y nos encajonan donde nos corresponde».
Además de la Copa de España y Bidasoa tiene muchas opciones de ir al Mundial y al Tour del Porvenir: «Están muy lejos y hay que demostrar mucho para disputarlas. Sería una experiencia y ojalá vaya, pero queda mucho y debo seguir trabajando».
Podio para Altuna y Mujika
Antes de la victoria de Samitier, el debutante Iñigo Altuna (Eulen) fue protagonista en la parte inicial de la Santikutz Klasika al escaparse en solitario y sumar puntos en los puertos para subir al podio como ganador de la montaña. Eriko Mujika (AMPO) se llevó las metas volantes.
Peio Goikoetxea (AMPO) segundo en Lazkao el domingo, se llevó el premio especial en la cota del Kirtenberg, la subida a Atagoiti por Mantxola, tras escaparse con Oscar Panisello. En la meta Iker Azkarate, tercero el día anterior, fue el mejor vasco en el puesto 25º por delante de Jokin Aranburu después de trabajar para Gonzalo Serrano, que acabó 18º, en el tramo final.
«Entrar en Lizarte fue mi mayor suerte»
Sergio Samitier cumple su cuarto año como sub’23 en el Lizarte y ayer logró su segunda victoria de la temporada tras la lograda en Oteiza. Además fue segundo en el Balenziaga, sexto en el Guerrita y séptimo en Aiztondo, donde se cayó cuando era cabeza de carrera. El año pasado sumó cinco victorias en Gorla, Durana, Altsasu, Zaldibia y una etapa de la Vuelta a Nafarroa.
Comenzó a andar en bicicleta con ocho años por «mi familia. Mi tío andaba en bicicleta, mi padre también y en Barbastro hay mucha afición y me enganché. Por eso empecé a andar desde muy chiquitito y llevo media vida de ciclista. Además tuve la fortuna de entrar en el Lizarte, que es una familia, y que es la mayor suerte como corredor. Si no llego a estar en este equipo no sé ni donde habría acabado».
El Lizarte se ha convertido además en el filial del Movistar, pero entiende que dar ese salto «es muy difícil porque es el mejor equipo del mundo. Prefiero no pensar en eso y trabajar día a día y hacer las cosas bien. Ojalá llegue, lo que venga vendrá, pero no quiero obsesionarme con eso».J.I.