Sergio Rodríguez (Iruñea, 1992) regresó el sábado al campo amateur en Natxitua tras fracasar su fichaje por el Bolivia continental, que no cumplió lo pactado. Solo pudo correr tres días en enero en Mallorca y uno en Portugal el 12 de marzo y marca los cuatro meses que quedan de temporada como la última oportunidad para pasar a profesionales o colgar la bicicleta.

El navarro explica a GARA que, al no cumplir el Bolivia lo comprometido, «no estaba a gusto. Hablé con ellos para ir cada uno por su lado y preferí volver a amateur y estar en un equipo grande y seguir labrando mi futuro por otro camino».

Habló con Jon Odriozola, el director con el Gipuzkoa en 2014, el mejor año con sus tres victorias, para ver si podía cubrir en el Euskadi Murias la plaza vacante por la retirada de Imanol Estévez, pero no solo el Bolivia tiene dificultades económicas: «Jon me dijo que estaría encantado de cogerme, pero que no dependía de él, sino de la empresa, y no les reprocho nada. Es el único equipo que da oportunidades, lo he intentado, pero si no cogen a nadie para sustituir a Imanol es que no hay dinero».

Al no poder correr con profesionales «valoré opciones. Corrí el año pasado con Caja Rural y podía ser una opción, pero tienen 27 corredores, cinco élites, y vi que no tendría opciones de buen calendario y siempre había tenido buena relación con Jorge Azanza y me dijo que estaría encantado porque le hacía falta un veterano para dar experiencia al equipo y el miércoles firmé y tramitamos la licencia».

«No sabía cómo estaba»

Sergio Rodríguez ha cubierto la baja de Noel Gil y ha heredado su bicicleta y ya fue protagonista el sábado en Natxitua al meterse en la fuga y trabajar para el ganador Mikel Alonso: «No sabía cómo estaba, les eché un cable a Mikel Alonso y Gotzon Martín para disputar la carrera. Salió bien y todos me agradecieron el trabajo. Al llegar a un sitio nuevo tienes que ponerte el mono de trabajo y aportar al equipo. Aunque estés bien, debes echar un cable primero para que te lo echen a ti después».

Está ilusionado con el Euskadi: «Siempre ha sido el referente del ciclismo vasco, uno de los tres grandes con Lizarte y Caja Rural. Tenemos un grupo de corredores muy bueno y me recuerda al año del Gipuzkoa, que había mucho nivel y ganamos 30 carreras. Es mejor estar en un equipo grande, con buena dinámica, que en uno al que le cuesta ganar. Eso te obliga a estar bien y andar más. Te contagias y es más fácil lograr los éxitos».

Destaca que «conozco a varios corredores de antes, pero sobre todo a Jorge Azanza, con el que coincidí en la facultad de INEF. Me hace ilusión estar con él. Sabe mucho y, tal como me han ido las cosas, él puede ser la clave para dar mi máximo nivel».

Se muestra muy agradecido a Azanza y a la Fundación Euskadi por darle la que se toma como última oportunidad. Correrá el domingo la prueba final de la Copa de España en Madrid y su gran objetivo es la Vuelta a Nafarroa: «Desde setiembre o paso a pros de verdad, pero no como este año, sino a un equipo serio, o cuelgo la bicicleta porque ya no podría ni correr el Euskaldun. En lo mío tengo ya trabajo ahora de preparador físico con cicloturistas, juveniles y algún sub-23 y, si no paso, me dedicaría de pleno a esto. Quiero disfrutar y el objetivo es correr en amateur para volver a pasar. Creo que con Jorge este es el sitio ideal para dar mi mejor nivel como con Jon Odriozola, que sacó de mí lo máximo. Con Azanza podría pasar algo parecido».

Egoitz García: «Si no cobro, no corro»

Egoitz García es el otro ciclista vasco del Bolivia continental y explica a GARA por qué no corre desde el 9 de abril: «Desde el equipo nos dicen que ha habido problemas con el ministro de Deportes de Bolivia, al que sustituyó una ministra. Nos reunimos la semana pasada y dijeron que liquidarán las deudas. Yo les dije que sigo saliendo en bici y que cuando me paguen lo que deben seguiré corriendo. Tengo 30 años y un hijo, ya he ido al Tour y no puedo correr gratis. Esperaré este mes y, si no, habrá que ir a la UCI porque hay un contrato firmado».

Le apena no correr porque empezó bien con un cuarto puesto en Portugal, 12º en Zornotza y 25º en Lizarra tras 21 World Tour: «Tiene más medios un buen conjunto amateur, pero al equipo solo le pedía cobrar a final de mes y yo me cuidaré para estar en las mejores condiciones». El Bolivia no corrió en Asturias por la economía que le impedía pagar los hoteles, sí participó en Madrid y Egoitz García espera cobrar todo para correr en Castilla León, Ordizia, Getxo y en Portugal, donde querían ganarse una invitación para la Volta a Portugal.J.I.